Los gusanos cabeza de martillo, tal como su nombre popular lo indica, son invertebrados alargados, blandos y sin patas, caracterizados por tener una extraña cabeza, similar a la de un martillo. Su aspecto puede aterrar a cualquier persona, pero lo cierto es que, según expertos en el tema, no ponen en riesgo la integridad física de los humanos, aunque sí atenta contra las plantas del jardín.
Su nombre científico es Bipalium spp. y representa una especie invasora proveniente de Asia, que actualmente está afectando a distintas ciudades de Estados Unidos y que puede continuar expandiéndose a Latinoamérica.
Estos gusanos miden entre 20 y 40 centímetros y aparecen particularmente en horario nocturno, después de las lluvias, en áreas húmedas y donde el sol no llega durante el día. Son de color marrón claro, con líneas oscuras en todo el cuerpo y puedes identificarlos porque se arrastran lentamente, casi como una babosa o caracol.
Dicha plaga representa un riesgo para el medioambiente, ya que se alimentan de las lombrices de tierra, las cuales son esenciales para que las plantas tengan un suelo fértil y saludable. De esta manera, los cultivos que estén sembrados en lugares donde observes gusanos cabeza de martillo no crecerán de la manera deseada. Y si no prestamos atención a la presencia de estos invertebrados, los ejemplares morirán a las pocas semanas.
Si identificas estos largos gusanos en el jardín, deberás colocarte guantes para agarrarlos y colocarlos dentro de una bolsa. A continuación, espolvorearle sal o arrojar un chorrito de vinagre o alcohol. Luego sellar la bolsa y tirarla a la basura.
Además, los especialistas recomiendan tener el jardín limpio y con buena ventilación para evitar el desarrollo de esta peligrosa plaga. También debes revisar debajo de macetas y piedras para ver si están escondidos estos gusanos. Por último, asegúrate de reducir la humedad en zonas con sombra.