Cruzar la calle con el celular en una mano, la vista clavada en la pantalla y sin prestar atención al tránsito dejará de ser una conducta tolerada en Luján de Cuyo. El municipio decidió avanzar con multas para los peatones que cometan esta falta, cada vez más frecuente en las calles.
En Luján de Cuyo, cruzar la calle mirando el celular puede generar multas de hasta 1 millón de pesos
La medida se incorporó al Código de Convivencia y apela a la responsabilidad que el peatón tiene en el tránsito. Está en duda el uso de auriculares
Diario UNO dialogó con la presidenta del Concejo Deliberante de Luján de Cuyo, Cecilia Soulé, quien explicó cómo se tomó la decisión y qué busca la ordenanza. Según detalló, la iniciativa no tiene un fin recaudatorio sino preventivo, en un contexto donde la distracción al cruzar calles se volvió un problema cotidiano.
La normativa ya forma parte del Código de Convivencia municipal y establece sanciones económicas que varían según la gravedad de la falta y las consecuencias que pueda generar.
Cruzar mirando el celular, una costumbre cotidiana y riesgosa
“Vivimos con el celular en las manos, esto ya se ha vuelto un problema”, sostuvo Soulé. Según describió, es habitual ver peatones cruzando con la cabeza gacha, sin mirar los semáforos, sin respetar la senda peatonal y sin advertir el movimiento del tránsito.
La funcionaria señaló que muchas personas se amparan en la prioridad legal de los peatones y “abusan” de esa condición. Si bien reconoció que el peatón es el eslabón más débil del sistema vial y por eso tiene prioridad, remarcó que esa protección también implica responsabilidad básica al circular.
Qué dice la ordenanza sobre el cruce con celular y cuáles son las multas
La sanción alcanza a quienes crucen la calle utilizando el celular de manera que afecte su atención. Las faltas leves contemplan multas de entre 70 y 1.000 unidades tributarias, lo que equivale aproximadamente a montos que van desde los $16.000 hasta los $220.000.
En los casos en que la distracción del peatón provoque un accidente o ponga en riesgo a terceros, la infracción pasa a ser grave. Allí, las multas pueden escalar desde los $221.000 hasta casi $1.100.000, dependiendo de la situación y del daño generado.
Soulé aclaró que no se prevé un esquema de control permanente: “No vamos a poner un preventor en cada esquina, ni la finalidad es colocar multas”. El objetivo central, insistió, es generar conciencia sobre conductas peligrosas que hoy están naturalizadas.
El debate por el manos libres y los auriculares
Uno de los puntos que todavía genera discusión es el uso de manos libres. La ordenanza lo permite, pero la presidenta del Concejo Deliberante puso el foco en los auriculares. Según explicó, las personas que caminan con auriculares suelen desplazarse mucho más distraídas, aisladas del entorno sonoro y del tránsito.
La intención es revisar este aspecto e incorporarlo de manera más clara dentro del Código de Convivencia, que ya regula otras situaciones vinculadas a la vida urbana, como ruidos molestos, recolección de residuos y tenencia responsable de mascotas.
Para el municipio de Luján de Cuyo, la medida busca ordenar una convivencia cada vez más atravesada por el uso permanente del celular y reducir riesgos antes de que se transformen en accidentes evitables.





