Fotogalería

En fotos: las pistas de la Masonería en el Cementerio de Mendoza

Un paso a contrapelo por la historia de la hermandad en nuestra provincia. A través del ojo atento de Diario UNO, recorremos los símbolos que dejan ver a trasluz los nombres de quienes se sumaron a las logias masónicas

Por UNO

Un viaje fotográfico por la necrópolis de Ciudad creada en 1846 descubre las huellas que las logias de Masones dejaron en la provincia. Los sitios de responso de personalidades notables, políticos, dirigentes y profesionales cuya memoria evoca el ser parte de un movimiento mundial que data de siglos y que aún se encuentra vigente y se reconoce como una institución filosófica, filantrópica y progresista.

El Cementerio de la Ciudad de Mendoza ofrece al ojo atento una serie de huellas que permiten descubrir algunos de los nombres que integraron las filas del movimiento cuyos cimientos datan de tiempos medievales.

Elsa Rodríguez, Juan Carlos González y Jesús Morales son los nombres detrás de las investigaciones históricas que hacen de llave de acceso al discreto mundo de los Masones en Mendoza. Invitamos a nuestros lectores a pasar:

Tiburcio Benegas

En un mausoleo descansan los restos del ex gobernador Tiburcio Benegas (1844-1908). Su caso es particular, ya que se trata de uno de los pocos mendocinos sobre los que se sabe a ciencia cierta que perteneció a la masonería mendocina, siendo el primer presidente de la Logia Luz de Hiram. Esta misma logia invitó a su funeral invocando directamente a la simbología masónica, con la figura del compás y la escuadra, instrumentos que simbolizan el cielo y la tierra, respectivamente.

En la tumba de Tiburcio Benegas se observan también las cadenas de la unión, símbolo vinculado a los límites que los masones utilizaban para erigir edificios, ya que también son llamados los "albañiles de catedrales", por su participación en las construcciones históricas principalmente en Gran Bretaña y Francia. También se destaca la presencia de tres ángeles que representan: sabiduría, fuerza y belleza.

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Rodeando el mausoleo de la familia Benegas, se puede notar la CADENA DE UNIÓN.

Rodeando el mausoleo de la familia Benegas, se puede notar la CADENA DE UNIÓN.

Jacinto Álvarez

"Médico de profesión, político por vocación". Así era definido Jacinto Álvarez, cuya historia de vida seguramente merece párrafos aparte. Con sólo 3 años sobrevivió junto a Agustín, su hermano gemelo, al terremoto de 1861, donde perdió a los otros 5 familiares que integraban su familia. Fue vicegobernador de Emilio Civit y luego gobernador, cuando éste último renunció para asumir un cargo nacional. En el lugar donde descansan sus restos resalta como primera huella masónica el pavimento de mosaicos, uno de los ornamentos de las logias que hacen referencia al piso en blanco y negro del Templo de Salomón, con cuadrados que representan el día y la noche; la luz y la oscuridad. En este caso, las cadenas de la unión están a la vista.

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Luis Levin

Otro de los nombres mendocinos que deja ver la huella de la masonería en el cementerio capitalino. El corroído mármol de su lápida deja conocer que falleció a los 52 años y que sus allegados lo recordaron con la escuadra y el compás superpuestos, símbolos de cielo y tierra que figuran el paso de lo terrestre a un estado supra humano de orden celestial.

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Romero Brunet

Fue un artista que tocaba el violín y era muy solicitado para musicalizar veladas de gala de la aristocracia mendocina. Fue una de las 4.000 víctimas del terremoto de 1861, momento en que Mendoza contaba con sólo 12.000 habitantes. Su tumba se destaca por la presencia de una pirámide en un solo bloque de piedra, tal como los de las grandes ciudades que históricamente se han relacionado con la masonería. La pirámide expresa la totalidad de la obra creadora, la imagen del universo, de la manifestación de la materia cuaternaria surgiendo de la expresión ternaria de lo Uno, constituyendo el Septenario manifestado del Universo y del Hombre. Al mismo tiempo envuelve un eje central invisible que va desde la cúspide al centro de su base cuadrada, símbolo del espíritu encarnado en la materia, que es el que mantiene su forma y da sentido a su existencia.

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Luciano Villanueva

Otro de los sobrevivientes del terremoto de 1861, del que resultó gravemente herido. Con una rica trayectoria política, fue cuatro veces diputado provincial, por distintos departamentos y militó junto a José Néstor Lencinas. Su mausoleo tiene el aspecto de una vivienda británica, con un frente en forma de delta, símbolo que vincula perfección, armonía y sabiduría. Además, se observan tres puntos conformados, con uno por encima de otros dos que representa la realidad invisible que lo produce todo; en este símbolo se resumen pasado, presente y futuro. Una particularidad: la tumba no tiene placa que lleve su nombre, pero sí una con el nombre "Adela", hija de Luciano Villanueva que está sepultada en el mismo lugar.

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Godofredo Paladini

Nacido en Italia y formado en medicina en Buenos Aires, este galeno dejó una fuerte influencia en Mendoza. Se presume que siendo masón, tuvo un rol activo en los enfrentamientos ideológicos entre masones y religiosos en torno a la laicidad del Estado. Su tumba todavía conserva las columnas que sostenían las cadenas de la unión, que fueron profanadas tiempo atrás. También se observan esculpidas las letras griegas alfa y omega, que representan el principio y el fin de la vida.

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Tumba no identificada

Un mausoleo de dimensiones sobresalientes tiene la particularidad de no contar con identificación alguna. Y en su cúpula suma misterio: en ella se destaca el Ojo de la Providencia o "el ojo que todo lo ve", conocido también en las logias como Delta Luminoso. Representa a un ojo que no mira ni al pasado ni al futuro, sino al presente, al instante indivisible que, entre el pasado y el porvenir, es como un reflejo de la eternidad en el tiempo.

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Correrle el velo a la historia de los masones en Mendoza cuesta su trabajo. Pero algunas huellas permiten ir armando el complejo entramado de esta hermandad y descubrir quiénes fueron los hombres que hicieron de eslabones en una cadena que al día de hoy mantiene vigencia ecuménica. La cuenta de Instagram: memoriadelosmendocinos, suele dejar algunas de esas "perlas" al paso de los curiosos.

Y todavía más puntualmente, acerca de la historia y la simbología masónica, esos mismos curiosos se pueden contactar vía mail con la Logia Faro del Desierto a: [email protected].

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