¿Lo conocías?

El extraño síndrome que provoca que una persona sea demasiado simpática

Este síndrome puede ser señalado como lo contrario al autismo, y las personas que lo padecen suelen ser vulnerables al abuso y al acoso

Si bien la sociabilidad puede ser encantadora, también puede generar dificultades en algunas ocasiones. Sucede que existe un extraño síndrome que provoca una atracción intensa hacia los demás, haciendo que incluso una persona puede interactuar con extraños de manera muy amigable.

El síndrome de Williams es una rara enfermedad genética que afecta aproximadamente a 1 de cada 7.500 personas, catalogadas en una situación contraria al autismo.

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Síndrome de Williams, la enfermedad genética que provoca simpatía en las personas

Para estas personas, el hecho de ser tan afectuoso tiene su lado negativo. Como efecto contrario, a menudo les cuesta mantener amistades íntimas y son propensos al aislamiento y la soledad.

A veces son demasiado abiertos y confiados con los extraños y no se dan cuenta de cuándo están en peligro, lo que claramente los hace vulnerables a situaciones de peligro como el abuso y el acoso.

Estas personas se entregan a todo el mundo sin prejuicios, lo que pasa de ser un rasgo encantador a una verdadera situación de peligro. Muchos sufren de ansiedad grave y, por culpa de todo esto, pocas personas con este síndrome viven de manera independiente.

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Como si lo social fuera poco, este síndrome suele venir acompañado de algunas afecciones cardiovasculares, retrasos en el desarrollo y problemas de aprendizaje.

Señales para identificar a una persona con este síndrome

  • Hipersociabilidad: extremadamente sociables, amigables y abiertos a interactuar con desconocidos.
  • Empatía: suelen ser muy empáticos y sensibles a las emociones de los demás.
  • Confianza: tienden a confiar en los demás fácilmente.
  • Atracción por la Música: manifiestan una gran afinidad y gusto por la música.
  • Retraso del Desarrollo: retraso en el desarrollo, discapacidad intelectual leve a moderada, y dificultades de aprendizaje.
  • Trastornos del Aprendizaje: dificultades para concentrarse, problemas de atención y posibles diagnósticos de TDAH (Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad).
  • Retraso en el Lenguaje: un retraso inicial en el desarrollo del lenguaje puede evolucionar hacia una locuacidad y una buena capacidad de aprendizaje auditivo.
  • Cara: frente amplia, nariz pequeña y respingada, boca ancha, labios gruesos, barbilla pequeña, y a menudo, un patrón estrellado en el iris (la parte coloreada del ojo).
  • Cuerpo: baja estatura, curvatura hacia adentro del dedo meñique, tórax hundido y problemas cardíacos como estenosis aórtica supravalvular.
  • Otros: problemas de alimentación, como cólicos, reflujo y vómitos.

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