El enólogo Gabriel Guardia dejará la dirección de la aceitera y acetaia Laur, que tomó en 2012, para comenzar un proyecto propio junto al también ingeniero agrónomo y empresario Alejandro Vigil.
El pase del año
Alejandro vigil y Gabriel Guardia serán socios.
"Luego de muchos años, estamos abriendo camino", contó Guardia, candidato a ejecutivo pyme del año 2023 gracias a su tarea en la Olivícola Laur, empresa a la que posicionó como líder mundial en aceite de oliva.
"Estoy dejando un lugar que quiero mucho, gente que quiero", expresó en diálogo con radio Nihuil sobre su salida de la empresa de José Millán.
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Nuevos rumbos para Gabriel Guardia
"Dejo una empresa que me ha mimado y cuidado mucho, que me ha dado muchísimas posibilidades y sobre todo dejo a un amigo", dijo sobre Millán, con quien trabajó los últimos 12 años.
En Olivícola Laur, Guardia desarrolló un método de extracción de aceite de oliva que maximiza la cantidad de polifenoles del fruto. Gracias a ello se lanzó un nuevo producto considerado superalimento por sus propiedades, ya que esos componentes son reconocidos, entre otras cosas, por retrasar el envejecimiento.
El nuevo rumbo lo encontrará en una sociedad con Alejandro Vigil, propietario de Casa Vigil y Chachingo. Con él iniciarán un camino para producir su propio aceite de oliva.
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"Es un nuevo desafío. Con Alejandro me siento muy cómodo. En todos estos años no pensé que íbamos a confluir en armar algo juntos sobre el aceite de oliva", expresó.
El proyecto se posicionará en Maipú, en la misma zona en la que se encuentran Chachingo y Laur. "La idea es hacer el lugar más atractivo", anticipó el enólogo.