La costura en casa es una actividad muy divertida, creativa y que supone un desafío constante. Cuando empezamos a coser, es importante preparar un buen costurero y comprar las telas indicadas.
La costura en casa es una actividad muy divertida, creativa y que supone un desafío constante. Cuando empezamos a coser, es importante preparar un buen costurero y comprar las telas indicadas.
Para que una prenda de ropa quede perfecta y acorde a lo deseado, existen varios factores a tener en cuenta: las medidas bien tomadas, el hilo, el estampado, la calidad y el tipo de tela.
Los tejidos de ropa se clasifican de diferentes maneras y por ende se usan para diferentes prendas. Existen tejidos o telas naturales de origen vegetal, como el algodón o el lino, muy suaves y perfectos para prendas ligeras y cómodas, como remeras, faldas, blusas y ropa de cama. Son telas absorbentes.
Por otra parte, las telas más porosas y rasposas como la lana o la seda. La ropa de este tipo suele ser más aislante que absorbente y no tiene tanta caída como para ser usada en vestidos sueltos y faldas. La seda se usa mucho en lencería, vestidos al cuerpo y blusas entalladas.
Los tejidos de origen sintético son muy resistentes y no se arrugan. Normalmente, este tipo de telas se utiliza en la confección de ropa deportiva. Es un tipo de tela elástica, de secado rápido y gran durabilidad, perfecta si estás buscando diseñar ropa todoterreno y firme.
Si piensas coser en casa más allá de la ropa y probar con algunos objetos decorativos, como manteles, servilletas, cortinas o almohadones, lo mejor es usar telas rasposas y pesadas, como la gabardina, la lona o el poliéster.