En ese año también comenzó a participar en torneos. En el primero salió tercero y ganó el segundo y el tercero en el que compitió. Todo un augurio.
En 2015 se concretó su "pase" a PH, otro bar de la misma calle y "seguí compitiendo y ganando títulos, aunque ninguno de mucha relevancia", dice.
Cuenta que al año siguiente "ocurrió una especie de quiebre en mi vida. Estaba dividido entre seguir haciendo lo que me gustaba, o buscar otra actividad que me diera la posibilidad de un mejor futuro económico. Fue así que en 2017 comencé a trabajar en el ferrocarril, como conductor de locomotoras".
La coctelería quedó de lado un tiempo, "hasta que en volví a competir, obteniendo nuevamente un segundo puesto en el torneo Vendimia".
Pero a comienzos de 2019 el inquieto Darío Navarrete recibió algunas noticias que comenzaron a complicar sus sueños. "Debido a una vida llena de muchos excesos, mi hígado acusó recibo y quedó al borde de la cirrosis. El médico me prohibió volver a tomar alcohol de por vida", dice.
Pero, después del primer impacto, "ese año volví a competir, sin la posibilidad de probar el trago que preparaba, y salí tercero. Entonces se me ocurrió que podría participar en las eliminatorias nacionales, para el Panamericano de Colombia 2021. Salí nuevamente tercero, sin probar mis tragos y clasificado como representante de Argentina en ese Panamericano".
Mientras tanto Darío ha seguido con su trabajo de maquinista de ferrocarril. "Para mi es uno de los mejores trabajo del mundo, de mucha responsabilidad. Me da mucho orgullo ejercer un oficio con tanta historia", dice.
Los recorridos de Darío Navarrete son siempre más o menos los mismos. De Palmira, estación cabecera, hasta Beazley (San Luis) o Cañada Onda (San Juan). "Por jornada laboral no podemos trabajar más de 8 horas, por lo que en esos puntos el tren lo agarra otra yunta, (pareja de conductor y ayudante), que continua en otro recorrido de 8 horas hasta la próxima estación de cabecera".
Pero el sueño de este joven es seguir representando al país en los torneos de coctelería. Y eso cuesta bastante dinero, al menos analizándolo desde el bolsillo de un trabajador.
Es por esto que busca algún sponsor, para poder continuar.
Seguro podría. Los sueños de Darío Navarrete tienen el poder de una locomotora, viajando a toda máquina.
Contacto de Darío Navarrete
Whatsapp: +54 9 2634 79-0019
Mail: [email protected]