Si tienes una mascota, debes saber que las pulgas son unas de las plagas más dañinas para con ellos. Afortunadamente, las mismas pueden ser ahuyentadas mediante el uso de una popular planta como lo es la de menta, que puede alejarlas gracias a su potente aroma.
Gracias a su potente aroma, la planta de menta es un excelente repelente de pulgas
Generalmente, las pulgas aparecen en una mascota producto del contacto con otros animales infestados, como también así por la presencia de los parásitos en el ambiente.
Cómo ahuyentar las pulgas usando la planta de menta
Al igual que ya se dijo antes, la planta de menta es un excelente remedio casero contra las pulgas, ya que su potente aroma les resulta desagradable y las aleja de cualquier foco en el que puedan hacer daño. Uno de ellos es tu mascota.
Para utilizarla, puedes plantar menta en tu jardín o colocar macetas con menta en lugares donde las pulgas suelen aparecer, como cerca de las camas de tus mascotas o en zonas de descanso.
Más allá de esto, la opción más popular es la de preparar una infusión de hojas de menta, y luego rociar la solución sobre el pelaje de tu mascota, como también en las áreas problemáticas.
Si no quieres preparar la infusión mencionada anteriormente, puedes recurrir directamente al aceite esencial de menta como producto comercial, aunque se recomienda siempre que lo diluyas en agua para evitar problemas en tu mascota.
En el caso de que nada de esto funcione, y tu amigo peludo siga con pulgas, lo mejor será que te contactes con un especialista para poder solucionar el problema.
Cómo preparar la infusión de menta para repeler pulgas
- 1. Prepara las hojas de menta: si usas menta fresca, lava bien las hojas. Si usas menta seca, asegúrate de que esté en buen estado.
- 2. Hierve el agua: coloca agua en una olla y llévala a ebullición.
- 3. Prepara la infusión: retira el agua del fuego y agrega las hojas de menta. La cantidad de hojas dependerá de la intensidad de aroma que desees. Generalmente, se recomienda usar 2 cucharadas de hojas secas por cada taza de agua.
- 4. Deja reposar: deja que la infusión repose tapada durante al menos 20-30 minutos para que los aceites esenciales de la menta se liberen.
- 5. Cuela la infusión: filtra la infusión con un colador fino o una gasa para eliminar las hojas.
- 6. Usa la infusión.