Cómo se manifiesta esta enfermedad
Las personas con alexitimia suelen concentrarse más en los acontecimientos externos que en sus procesos emocionales internos. Necesitan analizar situaciones pasadas para comprender qué sintieron en determinado momento, utilizando pistas contextuales como guía. Esta característica particular modifica la manera en que perciben e interactúan con su entorno.
La alexitimia presenta una relación estrecha con la interocepción, que es la capacidad de interpretar y etiquetar los estados internos en nuestra vida. Las personas afectadas por esta condición pueden experimentar dificultades para reconocer sensaciones básicas como:
- Hambre
- Sed
- Cansancio
- Dolor
- Excitación
Impacto en las relaciones y la salud mental
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Esta enfermedad afecta a muchas personas, que no lo saben.
La prevalencia de esta condición varía según diferentes grupos poblacionales. En personas autistas, por ejemplo, el porcentaje aumenta considerablemente, afectando entre un 33% y un 66% de los casos. También aparece con mayor frecuencia en individuos que padecen trastorno obsesivo compulsivo, trastorno disfórico premenstrual, trastorno de estrés postraumático, ansiedad y depresión.
Las emociones juegan un papel fundamental en las interacciones sociales. Cuando alguien tiene dificultades para interpretarlas, pueden surgir malentendidos en situaciones que generan emociones colectivas, como bodas o fallecimientos de figuras públicas. Las reacciones que parecen fuera de lugar para los demás pueden generar frustración tanto en la persona con alexitimia como en quienes la rodean.
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La buena noticia es que la conciencia emocional puede desarrollarse y mejorarse con el tiempo. Existen estrategias específicas que ayudan a las personas con esta condición a comprenderse mejor, como practicar la identificación y denominación de emociones y sensaciones físicas, o aprender a reconocer cómo se manifiestan en el cuerpo.