En la actualidad es un destino turístico único, pero en sus inicios era un pueblo maderero y ferroviario en declive en Washington. En la década de 1960, sus habitantes decidieron darle un giro radical a su destino y transformaron Leavenworth en una réplica de una aldea bávara, inspirándose en la belleza y el encanto de los Alpes europeos. Este cambio no solo revitalizó la economía local, sino que también convirtió al pueblo en un lugar ideal para los turistas, de hecho muchos lo documentan en las redes sociales.
Leavenworth-4-11.jpg
El pueblo se encuentra al pie de las montañas Cascade.
Qué hacer en el pueblo que parece sacado de un cuento europeo
Una de las principales atracciones de Leavenworth es su rica agenda de festivales y eventos. El Oktoberfest, celebrado con auténticas cervezas alemanas, música tradicional y danzas folklóricas, es una de las festividades más esperadas del año. Por otro lado, se destaca por su mercado navideño, que en diciembre se llena de las luces, coros y puestos de artesanía.