También participaron del encuentro el secretario general de la CTA de los Trabajadores, el diputado Hugo Yasky, y el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados, Eduardo Valdés.
A través de Yasky, Morales también agradeció "a todas las organizaciones sindicales y movimientos sociales por su solidaridad con el pueblo boliviano en el camino de la construcción de una Patria Grande".
El lunes, a través de su cuenta de Twitter, el presidente Fernández felicitó a Luis Arce (MAS) por su victoria en las elecciones presidenciales de Bolivia, y destacó que su triunfo es "una buena noticia para quienes defendemos la democracia en América Latina" y demuestra que "el pueblo no olvida a quien no lo traiciona".
"La victoria del MAS en Bolivia no solo es una buena noticia para quienes defendemos la democracia en América Latina; es, además, un acto de justicia ante la agresión que sufrió el pueblo boliviano", escribió el Presidente en su cuenta de la red social Twitter.
También la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner tuiteó sus "felicitaciones a Lucho Arce y David Choquehuanca que, junto a Evo, construyeron en Bolivia un gran triunfo popular. La Patria Grande feliz".
El Presidente dijo además que Morales, quien se encuentra asilado en la Argentina, "sufrió un golpe de Estado, destruyeron su casa y lo obligaron a abandonar el país mientras su familia y sus seguidores eran hostigados y perseguidos por el gobierno de facto.
Evo Morales permanece en la Argentina desde el 12 de diciembre último, cuando se le brindó asilo político luego de permanecer unos días en México bajo esa misma condición.
Poco antes, el 23 de noviembre de 2019, habían llegado a Buenos Aires dos hijos de Morales, luego de un pedido de Fernández, entonces presidente electo, a Mauricio Macri, para que en sus últimos días al frente del Poder Ejecutivo se allanaran los caminos para darle resguardo a la familia de Evo.
En noviembre del año pasado, Morales fue obligado a renunciar por la cúpula militar y policial, en un golpe de Estado concretado en Bolivia en medio de protestas en las calles por supuestas irregularidades en la reelección del exmandatario, tras casi 14 años de mandato.