Femicidio de Analía Maldonado

Quién es el fisicoculturista prófugo acusado de matar a Analía Maldonado

Samuel Llanos, el fisicoculturista acusado del femicidio de Analía Maldonado, en Los Toldos, posee antecedentes penales por lesiones leves, violencia familiar y abuso sexual

Samuel Llanos, el fisicoculturista buscado como sospechoso del femicidio de su pareja Analía Maldonado, cuyo cuerpo fue hallado calcinado en la mañana de este martes en cercanías de la localidad bonaerense de Los Toldos, posee antecedentes penales por lesiones leves, violencia familiar y abuso sexual, informaron fuentes policiales.

Por su parte, el intendente del partido de General Viamonte, cuya cabecera es la ciudad de Los Toldos, Franco Flexas, contó a Télam que además de las denuncias de una expareja, en 2017 Llanos fue dado de baja en su trabajo como inspector de tránsito municipal -para el que había sido contratado en 2013-, debido a que vecinos denunciaron malos tratos y porque había tenido episodios de violencia con su padre y con un hijo.

La primera denuncia contra Llanos se radicó el 10 de diciembre de 2009 en la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 9 de Junín y en el Juzgado de Paz de la localidad de General Viamonte por lesiones leves e infracción a la Ley 12.569 de violencia familiar, detallaron las fuentes policiales.

En diciembre de 2010, en tanto, fue nuevamente denunciado por violencia familiar y hurto por quien fuera su pareja y madre de su hijo menor –tiene tres de 21, 20 y 9 años-.

¿Dónde está Samuel Llanos?

Según los voceros, Llanos tiene reiteradas denuncias por violencia familiar radicadas en el Juzgado de Paz local por su expareja y uno de sus hijos en los años 2012, 2016 y dos en 2017.

En tanto, el 1° de marzo de 2017 fue acusado de abusar sexualmente de una mujer en un hecho investigado por la UFI 6 de Junín.

La última denuncia en su contra fue el 8 de febrero de 2020, nuevamente por violencia familiar y lesiones leves realizadas por dos de sus hijos, en la que intervino la UFI 1 y el Juzgado de Paz, concluyeron los voceros.