Minutos más tarde, el taxista alertó por la frecuencia que había sido baleado y que iba por el barrio Infanta de nuevo hacia el hospital. Una vez que llegó allí, se desvaneció en la rotonda, por lo que sus compañeros alertados lo llevaron hasta la guardia donde fue asistido.
Por las heridas de bala, los médicos lo pasaron directo a quirófano y fue operado de urgencia. Desde ese momento quedó en terapia intensiva, por lo que la víctima todavía no puede contar qué pasó.
La fiscal de Homicidios Claudia Ríos tiene la investigación en sus manos y está detrás de los pasos de los autores del hecho.
El taxi cuenta con la cámara de seguridad, donde habría quedado registrado el momento del ataque.