Un sereno de un club de Maipú que está acusado de abusar a varios menores de edad fue detenido hace una semana y quedó a disposición de la Justicia. Los padres de las víctimas le incendiaron su casa en venganza por los hechos.
El caso fue conocido por las autoridades en noviembre del año pasado, cuando un grupo de personas realizó una denuncia luego de que sus hijos le relataran los sucesos, según comentaron fuentes judiciales.
El detenido es Florencio Ortega, un hombre 65 años que trabajaba como sereno en el club Luzuriaga, ubicado en la localidad homónima.
Según consta en el expediente, el individuo aprovechaba las distracciones de los profesores de los niños -las víctimas son de ambos sexos y tienen entre 9 y 11 años- y los llevaba a la zona de camarines.
En ese lugar, el acusado le realizaba tocamientos a los chicos y los amenazaba con que si les contaban a alguien lo sucedido los enterraría en "el pozo", en referencia al lugar por donde salen los jugadores a la cancha del club.
Tras enterarse de la situación, los padres de las víctimas se dirigieron a la casa del sospechoso con intenciones de lincharlo y al no encontrarlo le prendieron fuego la casa, según relataron fuentes judiciales.
Lo cierto es que luego que se conocieran los vejámenes, el hombre se fugó y comenzó a ser perseguido por las autoridades. Personal de la División de Delitos contra la Integridad Sexual recibió la información que el prófugo estaba viviendo en una pensión en calle Federico Moreno y Alberdi, de la Cuarta Sección.
Los uniformados comenzaron a hacer tareas de observación en la zona cuando vieron que un hombre salía de la propiedad. Al compararlo con los registros fotográficos que tenían, se dieron cuenta que se trababa de Ortega.
Eso ocurrió el 11 de febrero, cerca de las 21, y desde entonces el presunto abusador se encuentra a disposición de la Justicia, que comenzó a tomar los testimonios y pruebas pertinentes para avanzar en el expediente.