(Editado por Raúl Adriazola) Mientras este lunes los vecinos de la zona de Ramos Mejía, provincia de Buenos Aires, realizaban por la tarde marchas de protestas, donde no faltaron roces con la policía, para hacer saber su bronca y consternación por el cruel crimen del kiosquero Roberto Sabo, desde la Justicia hicieron saber que los dos involucrados en el hecho de sangre pueden recibir penas durísimas, en especial el principal sospechoso, que arriesga recibir prisión perpetua. Leandro Suárez, el joven de 29 años detenido por el asesinato del comerciante podría recibir una pena de prisión perpetua, mientras que sobre la adolescente de 15 años que actuó este domingo en complicidad se dictó una "medida de seguridad" y fue remitida a un instituto de menores. Así lo indicó la fiscal general de La Matanza, Patricia Ochoa, quien indicó que Suárez está imputado por "robo agravado por el uso de armas y la utilización de una menor" y por homicidio también "agravado por criminis causa y la utilización de armas de guerra".