"Fue un momento de extrema tensión. Yo reaccioné instintivamente y me resistí a que se llevara el reloj. Forcejeamos y en un momento me caí de espalda. Pero me levanté y comencé a correrlo. A unos metros, se subió a una moto que lo estaba esperando. En general, los motochorros operan de a dos, el que maneja y el acompañante", detalló.
Rígoli contó que, cuando perdió de vista a los motochorros, volvió al restaurante para terminar su plato. "Había quedado la mitad de una milanesa en el plato, así que sin caer aún en todo lo que había pasado, me senté en la mesa y terminé mi almuerzo".
"Para mí, me habían marcado antes, quizás vieron por la televisión que uso el reloj en el brazo derecho o quizás me estuvieron observando mientras almorzaba", especuló.
Por ultimo dijo el conductor que "en el restaurante hacía nueve meses que no había incidentes", y precisó que el delincuente que forcejeó con él "era un flaco de 1,80 para arriba".
El episodio se produjo a menos de 50 metros de C5N, en el restaurante Miranda.
Fuente: NA