Aparentemente, de acuerdo a versiones de la investigación, la víctima del secuestro tenía a su cargo una casa de juego clandestino, en donde sólo participaban ciudadanos chinos.
La versión indicaba además, que el secuestro tuvo origen por una deuda de juego, a la vez que se indicó que los secuestradores pretendían U$S300.000 para liberar a su compatriota
Voceros de la fuerza informaron que, por este motivo, efectivos de la División Unidad Operativa Central de la Policía Federal Argentina (PFA), en colaboración con miembros de la División Unidad Federal de Investigación del Ciberdelito y la División Pericias Informáticas y Electrónicas iniciaron la investigación del caso.
De esta manera, los detectives lograron establecer que los secuestradores se encontraban en una vivienda del barrio de Núñez.
A raíz de las pruebas aportadas, la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Federal 8 dispuso el allanamiento de la propiedad.
Para concretar el procedimiento fue convocado el Grupo Especial de Operaciones Federales (GEOF) de la PFA, informaron fuentes de la fuerza.
Los efectivos planificaron la irrupción en el domicilio y al ingresar lograron liberar a la persona cautiva y detener a dos sospechosos.
Se trata de dos ciudadanos chinos de 35 y 38 años, acusados de participar del secuestro extorsivo del connacional, que quedaron a disposición del magistrado interventor, añadieron las fuentes consultadas.
Además, los uniformados se incautaron de un automóvil Honda Cívic que habría sido utilizado para llevar a cabo el secuestro, $166.666 en efectivo, U$S10.600 y ocho teléfonos celulares.