En Córdoba, Rosario Central pasó a la final de la Copa de la Liga al ganarle por penales (2-0) a un River que insólitamente desperdició sus cuatro remates.
En Córdoba, Rosario Central pasó a la final de la Copa de la Liga al ganarle por penales (2-0) a un River que insólitamente desperdició sus cuatro remates.
El equipo de Miguel Russo jugará el sábado próximo en Santiago del Estero la final del segundo certamen oficial del año frente a Platense, que eliminó por penales a Godoy Cruz, en San Nicolás.
Tras igualar 0 a 0 en los 90' llegaron los penales, tal como pasó en 4 de los otros 5 partidos de play off de este torneo.
En la definición, Fatura Broun detuvo el remate de Enzo Díaz, Lovera marcó para Central, Broun atajó el remate suave de Palavecino, Armani se lució ante el disparo de Campaz, el arquero de Central adivinó la intención del Pity Martínez, Malcorra puso el 2 a 0 para el Canalla y Lanzini remató desviado para sentenciar la victoria de Rosario Central.
El primer tiempo no fue bueno, porque River tardó en acomodarse y tomar el protagonismo del juego, recién lo hizo en los últimos 20', mientras Central no tuvo capacidad para sorprender a la novedosa defensa que alineó Demichelis, con el uruguayo Boselli como lateral, marcando al colombiano Campaz.
Con ese panorama, no extrañó que llegaran al descanso con solo un par de llegadas por lado y ninguna con chances serias de abrir el marcador.
En el segundo tiempo el partido fue decayendo porque ambos equipos sintieron el esfuerzo y también el miedo a perder. River apostó por los ingresos de Echeverri, Lanzini y el Pity Martínez, en una clara intención de buscar la victoria, pero también perdió a Enzo Pérez (lesionado) y le faltó frescura para romper el cerrojo defensivo planteado por Miguel Russo.
Lo cierto es que River se quedó afuera y ahora solo espera el cierre del año con la final del Trofeo de Campeones, ante Platense o el propio Rosario Central.