El uso de sistemas de nieve artificial de última generación permitió mantener las pistas en buen estado incluso cuando el clima no ayudaba, algo que marcó la diferencia frente a otros centros. “La gran apuesta tecnológica del cerro Catedral permitió mantener el atractivo en jornadas en que otros destinos estaban complicados. Esto nos diferencia y nos posiciona a nivel internacional”, dijo el secretario de Turismo municipal, Sergio Herrero.
Entre las novedades también estuvo la app oficial del cerro, que superó las 30.000 descargas y concentró datos útiles como pronósticos, mapas y estado de pistas. Además, se renovó toda la flota de máquinas con 15 PistenBully Polar 600 nuevas, que mejoraron la preparación diaria de las pistas.
Más allá de la nieve, la temporada generó movimiento en Bariloche, con cientos de empleos y más actividad para el comercio local. Los clubes y escuelas de esquí también tuvieron un papel importante en la formación de los más chicos y en la promoción del deporte invernal.
Herrero valoró el trabajo conjunto entre la concesionaria y el Municipio, aunque el desafío a futuro será sostener este nivel de inversión y sumar mejoras en accesibilidad y servicios para que la experiencia esté a la altura de lo que la montaña promete.
Con el cierre de la temporada, Catedral muestra un año sólido y ya apunta a seguir creciendo en tecnología y servicios, en un contexto en el que la competencia con otros centros de la región está cada vez más ajustada.