Dos días después de que viera la luz una exclusiva entrevista con el líder del Cártel de Sinaloa, Joaquín "El Chapo" Guzmán, que dio la vuelta al mundo, el actor Sean Penn no se arrepiente de la nota que hizo para la revista Rolling Stone. Agregó que no tiene nada que esconder sobre el tema. Fiscales mexicanos han dicho que podrían investigar a Penn y a la actriz mexicana Kate del Castillo, quien ayudó al norteamericano a contactar con el criminal cuando aún estaba prófugo. "El Chapo" fue capturado nuevamente el pasado viernes.
"No tengo nada que ocultar'', declaró en un cruce de correos electrónicos con Associated Press. Sean Penn, al ser preguntado por las fotos publicadas por la prensa mexicana en las que se lo ve junto a la actriz mexicana Kate del Castillo poco antes de tener el encuentro con Guzmán. "El Chapo'', el narcotraficante más buscado del mundo, fue capturado el pasado viernes en el estado de Sinaloa, más de tres meses después de que Penn y Del Castillo lo entrevistaran el pasado 2 de octubre, y a seis meses de su espectacular fuga de una cárcel de máxima seguridad.
Penn no respondió directamente a la pregunta de si consideraba apropiado haber enviado su artículo a Guzmán antes de publicarlo para que el narcotraficante le diera su visto bueno, tal y como cuenta explícitamente en el artículo. Y al recordarle los "muchos golpes'' que le estaban dando por esa forma de proceder, respondió que "los golpes, los está dando el texto" de la entrevista. Tampoco fue claro sobre si adoptó las medidas de seguridad necesarias para proteger a su fuente, es decir, "El Chapo". "Mis aparatos de comunicación no tuvieron nada que ver (en la captura)'', respondió. Días después del encuentro con "El Chapo", las fuerzas de seguridad asaltaron el lugar, lo que forzó a suspender las reuniones entre el actor y el narco, y a este a refugiarse en la ciudad de Los Mochis, donde finalmente fue capturado el viernes.
El actor se autodenominó en el artículo de la Rolling Stone "el hombre más tecnológicamente analfabeto de la Tierra'' aunque describe cómo cambiaba de teléfonos para garantizar que sus comunicaciones no fueran interceptadas por las autoridades mexicanas, y afirma que dejó su celular en Los Angeles cuando viajó a México a verse con Guzmán. "No vi ojos espías a la vista pero asumo que estaban ahí'', indica en el texto.
Bajo estudio. La fiscal general de México, Arely Gómez, explicó que tenían conocimiento de esa cita gracias al seguimiento que estaban llevando a cabo de uno de los abogados de Guzmán y que eso "nos hace estar prácticamente en el lugar de los hechos''. Pero agregó que en aquella ocasión, el 2 de octubre, no actuaron porque "las condiciones no permitían hacer un operativo''. Sin embargo, sí lo pudieron hacer cuatro días después, cuando ``El Chapo'' se les escapó por muy poco de la zona de Tamazula, en Durango, estado vecino de Sinaloa. En ese momento las fuerzas enviadas optaron por no poner en peligro a dos mujeres y una niña que estaban con el capo. En un momento de la fuga, el narco se habría lastimado al rodar por un barranco. La entrevista con Sean Penn fue la clave para ubicarlo, según la fiscal mexicana.
Al ser preguntada si la Procuraduría estaba investigando a Del Castillo y Penn, la fiscal eludió contestar y se limitó a decir que se investigan las dos reuniones que el abogado tuvo con ellos y "posibles conductas delictivas que se hayan podido cometer en México''.
Afirmó que el interés de Guzmán por hacer una película sobre su vida fue clave en su captura, pero no quiso especular si Del Castillo y Penn podrían haber incurrido en algún delito por su encuentro aunque admitió que una cita de esas características puede no implicar ningún delito, caer en la figura de encubrimiento o llegar ``hasta algo muy grande''. Todo depende de los acuerdos que se hicieron entre las partes.
El diario mexicano El Universal publicó 10 fotos que muestran cómo fue monitoreada la visita de los dos actores a México. Las fotos muestran a Penn y Del Castillo cuando arriban a un aeropuerto, luego a un hotel, y después intercambian saludos con unos hombres que los llevan a una pequeña pista de aterrizaje, desde la que volaron a la selva para reunirse con Guzmán. Las fotos son del gobierno mexicano.