Las contradicciones comenzaron desde el primer día. las autoridades municipales habían dicho que habían recogido unas 4,5 toneladas de popochas entre el martes y el jueves, pero el presidente de la Cooperativa de Pescadores del poblado, Octavio Cortés, dijo a Efe que solamente el martes habían retirado once.
Habitantes de los poblados cercanos a la laguna, que está a 41 kilómetros de Guadalajara (una de las principales ciudades del país), acusan a tres plantas de tratamiento de desechos orgánicos y otras 15 fábricas asentadas cerca de la ribera como las culpables de la situación del río. Esta es la cuarta ocasión en el año en que hay una mortandad de peces en la ribera de la laguna, pero ninguna con esta gravedad.
La secretaria de Medio Ambiente de Jalisco (Semadet), Magdalena Ruiz Mejía, explicó que se trataba de un “grave fenómeno”. El municipio de Tlajomulco había dicho en un inicio que las muertes se habían debido a una caída en el oxígeno a un cambio de ciclo en la temperatura del agua, pero la secretaria afirmó que la “mala gestión” del tratamiento del agua es una causa probable de la contaminación que sufre la laguna.
Por si fuera poco, hay un ingrediente más. El laberinto burocrático mexicano ha empeorado la actuación antes, durante y después de la emergencia. La alcaldía de Tlajomulco es gestionada por el partido Movimiento Ciudadano, una rara avis de la política mexicana, que en Jalisco ha alcanzado una inusitada fuerza por fue de los tres principales partidos de México: el oficialista PRI, el conservador PAN y el izquierdista PRD. De ese municipio depende la laguna. El presidente del MC, Hugo Luna, había anunciado el pasado 12 de agosto el “rompimiento institucional” con el gobernador de Jalisco, el priista Aristóteles Sandoval.
El día que el líder del MC anunció el rompimiento con el Gobierno estatal, el alcalde de Tlajomulco, Ismael del Toro, afirmó que una de las “pruebas” de que la administración de Aristóteles Sandoval intentaba dañar a los gobiernos del MC era precisamente el abandono de la Cajititlán. Aseguró entonces que, sistemáticamente, se han roto acuerdos de trabajo entre los dos gobiernos para limpiar la laguna, pese a las advertencias de la Semadet.
Fuente: El País