Setiembre es un mes donde en el hemisferio Norte suelen estrenar muchas de las producciones originales producidas por las principales plataformas y varias de ellas llegan también a nuestro país, incluso como parte de la “premiere” a nivel mundial.
Setiembre es un mes donde en el hemisferio Norte suelen estrenar muchas de las producciones originales producidas por las principales plataformas y varias de ellas llegan también a nuestro país, incluso como parte de la “premiere” a nivel mundial.
Por lo general estas series –con una producción y presupuestos que nada tienen que envidiar a las grandes películas de Hollywood- despiertan una gran expectativa, reforzada también por campañas publicitarias que van “in crescendo” a medida que se acerca la fecha de llegada a las pantallas.
Tal fue el caso de Lejos (Away) y The Boys 2, de Netflix y Amazon Prime Video respectivamente, que se convirtieron en dos de las destacadas preferencias del público argentino en estos últimos días.
El primer atractivo de esta serie es su protagonista: Hilary Swank, actriz ganadora de dos premios Oscar por sus actuaciones en Million dollar baby y Los muchachos no lloran.
En esta producción de 10 capítulos (de unos 50 minutos en promedio) es la astronauta Emma Green, comandante a cargo de una misión espacial internacional que planea llegar a Marte. El grupo que lidera está integrado por el botánico británico Kwesi (Ato Essandoh), el ingeniero ruso Misha (Mark Ivanir), el cirujano de la India Ram (Ray Panthaki) y la química china Lu (Vivian Wu).
Un accidente en la primera escala del viaje de la Tierra a la Luna, cuestiona su lidesrazgo y hace que parte de la tripulación esté en su contra. Además, en Tierra han quedado su esposo Matt (Josh Charles), que sufre un grave episodio de salud en esos días y su hija adolescente, Lex (Talitha Bateman), que no sólo debe lidiar con el hecho de que su madre estará ausente tres años por esta misión, sino que de golpe debe hacerse cargo de su padre.
Con un muy buen diseño de producción (que incluye las escenas en el espacio) y un elenco talentoso, el problema de Lejos vuelve a ser, como en tantas otras series y películas, el guion. Además se suma a esta corriente hollywoodense de “corrección política” (que ahora se ha cristalizado en los criterios de inclusión que deberán cumplir los filmes para poder acceder a Mejor Película en los Oscar) que da como resultado productos anodinos y uniformes, ya sea en Marte o en cualquier lugar de la Tierra.
En el caso de Lejos, la corrección empieza con el equipo espacial: un indio, una mujer china, un ruso y un hombre negro (el británico es de origen ghanés), sin olvidar que la propia comandante es mujer. A esto se suma que un miembro de la tripulación “saldrá del closet” en plena travesía, en un capítulo de narración forzada, con dimes y diretes más propios de una telenovela.
Todos los logros que las minorías han obtenido y las que faltan, son imprescindibles en el mundo real, pero en la ficción, cuando se ven los hilos y los mensajes son tan obvios, sólo terminan empalagando o aburriendo.
A esto hay que sumar que la comandante Green, dividida entre su rol de madre-esposa y astronauta; llama todo el tiempo a su familia para reflejar su cercanía a pesar de estar tan lejos, planteando esa dicotomía entre vocación y familia para las mujeres, a esta altura, ya un tanto añeja.
Lejos tenía todos los elementos para sobresalir, pero su mediocre guion no se lo permitió.
Esta serie es una de las fortalezas de Amazon Prime Video y se ubica dentro de esas ficciones donde los superhéroes no se parecen a los de los cómics o los clásicos del cine, como sucede en producciones como The Umbrella Academy o Doom Patrol, también muy exitosas.
The Boys basa parte de su éxito en la feroz crítica a muchos aspectos de la sociedad de consumo estadounidense, que es capaz de crear y consumir todo tipo de productos, en este caso, superhéroes. Los “Siete” (así se llama el grupo de hombres y mujeres con distintos súper poderes) liderados por Patriota (Antony Star), son manejados por Vought, una empresa que decide desde la imagen que deben proyectar, hasta su vestuario y las intervenciones públicas que tendrán en nombre de la justicia. Algo extraño sucede en esa corporación, que tiene que ver con el origen de sus súper poderes y allí es donde aparecen los “boys”, que intentarán desenmascarar a la compañía y los planes siniestros de algunos de los Siete.
En esta segunda temporada, los liderazgos están en cuestionamiento: por un lado Patriota verá una amenaza en la nueva incorporación del grupo, la joven Torrencial (Aya Cash) y en el bando opositor, el Carnicero (Karl Urban), alma mater de los Boys, sigue desaparecido. Mientras tanto, avanza la cooperación entre la súperheroina Starlight (Erin Moriarty) y Hughie (Jack Quaid, hijo de los también actores Dennis Quaid y Meg Ryan) para tratar de exponer la manera en que Vought ha “creado” a estos hombres y mujer con excepcionales poderes.
Sarcástica, crítica con el poder corporativo y político, con explícita violencia y una moral que haría sonrojar a sus pares de Marvel, The Boys 2 redobla la apuesta que ya nos deslumbró en su primera temporada.