Es reconocido a nivel mundial que el Feng Shui utiliza a muchas plantas como protagonistas de sus rituales y amuletos por los aportes energéticos naturales que pueden brindar a cada uno de ellos. Entre aquellas con mayor consideración aparecen el laurel, el romero, el jazmín, el sándalo, la menta y la albahaca.
Si hablamos puntualmente del tomillo, estamos hablando de una planta aromática que desde hace miles de años es utilizada para limpiar los espacios, incluso los romanos la utilizaban con el objetivo de purificar las viviendas y las mujeres de esta época se la daban a los guerreros para aumentar su coraje. Para la mirada del Feng Shui, algo se asocia a este aspecto histórico de la planta.
Ya sea como planta o simplemente como decoración, el tomillo puede aportarnos grandes beneficios a nuestra vida si está presente en nuestra casa. La mirada del Feng Shui recomienda esta planta para ayudar a purificar los espacios y lograr absorber las malas energías.
El tomillo es protagonista de muchos rituales vinculados directamente a la limpieza energética de la vivienda y purificación de distintos espacios personales. Además otros beneficios que suele destacar el Feng Shui de esta planta se asocian a una mejora de la autoestima, ayuda a evitar las pesadillas y protege el hogar.