Imagina abrir la puerta del hogar y que te reciba un delicado aroma floral fresco, envolviendo cada rincón con una sensación de armonía y frescura. Los aromatizantes tienen el poder de transformar un espacio de casa en un lugar cómodo y acogedor.
Imagina abrir la puerta del hogar y que te reciba un delicado aroma floral fresco, envolviendo cada rincón con una sensación de armonía y frescura. Los aromatizantes tienen el poder de transformar un espacio de casa en un lugar cómodo y acogedor.
Te has preguntado ¿Qué pasaría si, en lugar de usar uno comercial, lleno de químicos, pudieras crear el tuyo propio con ingredientes naturales? Además de ser más amigable con el medio ambienta, un aromatizante casero le dará a tu hogar un sello único, con fragancias auténticas que conquistarán a tus invitados.
A continuación, te enseñamos el paso a paso para preparar un ambientador casero que lleva jazmín y manzanilla como ingredientes principales. Esta receta casera, sorprenderá a tus invitados.
1 taza de agua destilada
La preparación en sencilla, en una olla pequeña debes calentar el agua sin dejar que hierva. Agrega las flores de jazmín y las bolsitas de té de manzanilla. Deja infusionar durante 15 minutos, para que se activen las propiedades de ambas hierbas.
Una vez que haya transcurrido el tiempo, cuela la mezcla y deja enfriar. Añade el alcohol y las gotas de aceite esencial de limón, mezcla bien.
Vierte el líquido en el frasco atomizador para que sea más fácil de aplicar en las cortinas, sillón o cualquier rincón del hogar que quieras perfumar. Otra opción es utilizar un frasco o recipiente de vidrio de boca ancha, y colocar palillos de brochetes para que se impregnen de aroma y perfumen tu casa.
Una vez que pruebes este aromatizante, no volverás a comprar las alternativas comerciales. Es ideal para salas, dormitorios o incluso baños.