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Ni vinagre ni bicarbonato: el eficaz truco casero para quitar la línea de grasa de tu olla

Casi todos tenemos en casa ollas viejas con mucha grasa acumulada, pero este sencillo truco casero permite eliminar esa grasa y realizarle una limpieza profunda

Martina Baiardi
Por Martina Baiardi [email protected]
Ni vinagre ni bicarbonato: el eficaz truco casero para quitar la línea de grasa de tu olla

Ni vinagre ni bicarbonato: el eficaz truco casero para quitar la línea de grasa de tu olla

Si tienes una olla con una línea de grasadifícil de quitar, tranquilo/a, existe un truco casero, fácil y efectivo, que está dando de qué hablar, y lo mejor de todo: usa ingredientes que seguramente ya tienes en tu cocina, pero que nunca imaginaste usar para este fin.

El truco casero estrella: limón y sal con detergente de cocina

Este método ha cobrado fuerza gracias a su potente poder desengrasante y su facilidad de aplicación. La combinación de limón, sal y detergente lavaplatos actúa como un limpiador natural que remueve la grasa incrustada sin dañar el metal ni dejar olores fuertes.

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¿Qué ingredientes necesitas?

  • 1 limón (fresco)
  • 1 cucharada de sal fina o gruesa
  • 1 chorrito de detergente líquido para platos
  • 1 esponja o estropajo

Paso a paso para eliminar la línea de grasa de tu olla

Para truco casero de limpieza es necesario seguir los siguientes pasos:

  1. Corta el limón por la mitad y exprímelo directamente sobre la zona afectada por la grasa.
  2. Espolvorea la sal sobre el jugo de limón, creando una especie de pasta arenosa.
  3. Agrega unas gotas de detergente y deja actuar durante 5 a 10 minutos.
  4. Frota con una esponja (preferiblemente con fibra verde) haciendo movimientos circulares.
  5. Enjuaga con agua caliente y seca con un paño limpio.
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En minutos, notarás cómo esa molesta línea marrón desaparece, dejando tu olla como nueva.

Este truco casero de limpieza es altamente efectivo para objetos como las ollas debido a que el limón tiene un alto contenido de ácido cítrico, que ayuda a descomponer grasas y manchas. La sal actúa como un abrasivo suave que ayuda a despegar los residuos sin rayar. Y el detergente, por otro lado, potencia la limpieza, disolviendo aceites y suciedad acumulada.

A diferencia del vinagre y el bicarbonato, que muchas veces no logran eliminar grasa pegada por el calor, este trío de ingredientes trabaja mejor sobre superficies metálicas y acero inoxidable, sin dejar residuos ni afectar el brillo natural de las ollas.

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