En Argentina, y tras la autorización de la ANMAT, el Gobierno nacional oficializó, a principios de este mes, la aplicación de la vacuna Spikevak desarrollada por el Laboratorio Moderna, a personas mayores de 12 años.
La población del estudio se divide en 3 grupos de edad: de 6 a 11 años; de 2 a 5 años y en menores de dos años; los resultados preliminares presentados corresponden al primero grupo.
Los resultados, evaluados sobre 4.753 participantes, mostraron "una fuerte respuesta inmune en esta cohorte de niños un mes después de la segunda dosis".
La empresa informó también que "la mayoría de los eventos adversos fueron de gravedad leve o moderada" y que los efectos secundarios más comunes fueron fatiga, dolor de cabeza, fiebre y dolor en el lugar de la inyección.
El estudio se está realizando en colaboración con el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID), parte del Institutos Nacionales de Salud (NIH) de Estados Unidos y con la Autoridad de Investigación y Desarrollo Biomédico Avanzado (BARDA) del mismo país.
El estudio de Fase 2/3 continúa inscribiendo a niños de 6 meses a 5 años.
Moderna anunció que planea enviar estos datos a la Administración de Drogas y Alimentos de EE. UU. (FDA), Agencia Europea de Medicamentos (EMA) y otros reguladores globales en el corto plazo para que se evalúe la aprobación de uso de emergencia en esta franja etaria.