Padecer o no una enfermedad está a un simple lavado de manos de distancia. Este es el método más fácil, rápido y económico para evitar enfermedades y es necesario hacer que más que un hábito se convierta en una necesidad constante.
De hecho, para los profesionales de la salud, la higiene de manos es una obligación que no puede ser omitido por ninguna circunstancia.
Para un efectivo lavado de manos se deben tomar en cuenta algunas recomendaciones, empezando con una duración de unos 40 segundos además de usar una cantidad adecuada de jabón y abundante agua, secarse con toallas de papel desechables usando esta para cerrar la canilla y evitar la exposición repetida de agua caliente por el riesgo de dermatitis.
Un punto clave para un efectivo lavado de manos es prestar atención a las zonas ciegas de las manos.