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Felipe Staiti: la búsqueda de raíces y el baúl de su abuelo

El guitarrista Felipe Staiti buscando armar la historia de su familia, encontró el baúl que trajo su abuelo desde Italia en 1900, y se instaló en Mendoza

No existen amuletos u otros objetos inanimados que contengan magia y actúen por sí solos. La magia está en las personas, que con su impronta les dan a las cosas poderes extrasensoriales. Tal es el caso de un simple baúl de madera, que pudo encontrar olvidado en un galpón de la casa familiar Felipe Staiti, el reconocido guitarrista del grupo de rock mendocino los Enanitos Verdes, y éste se transformó en un puente entre el exitoso músico y su herencia de sangre, representado por su abuelo, el tronco de una familia llegada de Italia, que arraigó y creció en Mendoza.

Felipe Staiti anunció en sus cuentas de redes sociales el hallazgo, con mucha alegría, este descubrimiento, que sirvió para afirmar la impronta del guitarrista de buscar el origen de su familia paterna. El baúl estaba en la casa de un tío, y pronto sintió que el elemento lo conectó e impulsó en su búsqueda familiar, casi como si pudiera tocar la mano de su abuelo fallecido muchos años antes de que naciera, entendiendo los sueños que llevaron al siciliano a cruzar el océano a forjar un futuro más promisorio.

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"Yo no lo conocí a mi abuelo, murió con 93 años antes de que yo naciera", comenzó a explicar el mendocino Staiti, uno de los más prestigiosos guitarristas del país, que agregó: "Llegó en 1900 desde Messina -Rodi Milici-. Creo que ya había un Staiti, que puede haber sido un hermano de él, y por eso se animó a venir. Luego llegaron primos y otros parientes. Según los registros, salió del puerto de Nápoles, hizo escala en Brasil antes de llegar a Buenos Aires", contó Felipe.

Sobre los motivos de la venida a nuestra tierra, la de don Staiti no fue diferente a la de miles de europeos inmigrantes. "Se vino a Argentinapor la hambruna europea. Allá había hambre en serio. Vino directo a Mendoza. En esos años los españoles iban a San Juan, y los Italianos a Mendoza", confesó el integrante de la banda Enanitos Verdes.

Demostrando que la ambición de su ancestro era la de formar una familia, Felipe señaló: "Mi abuelo era soltero y mandó luego a buscar a mi abuela y en 1904 se casaron. En esa época salía nbarcos todos los días 'para hacerse la América'. Allá en Europa se referían a Estados Unidos como América, no es que los estadounidenses se apropiaron del nombre", comentó el también empresario bodeguero.

Los Staiti de Messina

"Según me contó un primo que vive en Estados Unidos, y es estudioso del tema de la historia de la familia, dijo que hasta encontró un pueblo llamado Staiti, en Reggio Calabria, que solía mencionar mi abuelo. Para ellos es un acontecimiento que legue un 'Staiti' de sangre, ya que hay uno de ellos que tiene un hotel en Brancaleone, y según él tiene este apellido por el pueblo. Este primo, que vive en Nueva York se enteró por otro italiano, en el año 1986, que había un pueblo con nuestro apellido", comentó el mendocino.

Dura fue la tarea de rastrear sus orígenes para el guitarrista, ya que partió desde cero en su búsqueda. "Mi papá lamentablemente murió hace 40 años, y no pude hablar mucho de su padre. Era el menor de los hijos, y se casó grande. Había un tema con los inmigrantes, ya que no hablaban mucho con sus hijos de su país, creo que estaban un poco enojados con su país, ya que se tuvieron que escapar del hambre", especuló Felipe.

El Arca de los recuerdos: el baúl del abuelo

"El otro día fui a ver a mi prima, estaba en la casa de mi tío, donde vivió también mi abuelo, y me mostró un galponcito. Ahí me llamó la atención un bulto lleno de tierra y tapado de cosas. Le pregunté a mi prima por eso, que era un baúl, y me dijo: '¡Ah, era del abuelo, donde trajo sus cosas de Italia!'", relató el rockero.

"La verdad que no lo podía creer, pensé que me estaba jodiendo. Llevatelo, me dijo, y no lo dudé ni un instante", agregó.

Felipe había hecho contacto con su pasado, y el "portal interdimensional" había resultado ese mueble de madera. "Yo creo que, por el hecho de viajar tanto, me hace tener una sensibilidad especial para estas cosas. Tuve la suerte de poder conocer dónde trabajó mi abuelo en su pueblo, era un molino. Comencé a establecer una relación sin conocerlo", reconoció. "Pensaba en lo difícil que tiene que haber sido para él meter su vida en un baúl, junto a todos sus sueños", reflexionó.

Muchos años habían pasado y muchos kilómetros había recorrido el arcón, por lo que su estado no era óptimo. "Se lo di a un amigo, Álvaro Martínez, que lo llamo el restaurador de corazones, porque no se dedica profesionalmente a la restauración, lo hace de corazón (y hobbie). En su casa ha restaurado hasta esas bombas de nafta antiguas, manuales, y las dejó impecables. También me hizo un mueble para colgar guitarras con un placard antiguo que modificó", explicó el músico mendocino.

"Apenas salí de la casa de mi prima, le mandé la foto del baúl a Álvaro, y ahí nomás se prendió y me dijo que se lo llevara. A la tarde, me manda un mensaje, y me dice que ya lo estaba desarmando", añadió Staiti sobre el segundo paso del hallazgo.

"Fue muy importante para restaurarlo el estado en que se encontraba el baúl, que es de madera, pero no se ha podrido. No lo va a desarmar íntegramente, ya que están remachadas las tablas, así que propuso mantenerlo lo más original posible e ir arreglando lo roto, como por ejemplo el forro de lienzo, al que emparchará en vez de reemplazarlo, para no sacar los remaches. La idea es no se vea como un mueble nuevo, sino como algo antiguo, lo que es, en realidad. Le va a restaurar hasta la cerradura, poniéndole su llave", comentó entusiasmado el integrante de Los Enanitos Verdes.

El tema con el baúl, más allá de su significación como objeto, tiene la importancia de la ilusión de mi abuelo, que lo arrastró por los puertos buscando una nueva vida El tema con el baúl, más allá de su significación como objeto, tiene la importancia de la ilusión de mi abuelo, que lo arrastró por los puertos buscando una nueva vida

El boomerang de la inmigración

Algo que ayudó a Felipe en su rastreo por Italia, fue la radicación en la península de su hijo. "Tengo un hijo que vive en Italia, y por eso comencé a recorrer la historia de la familia, desde el año 2000 más o menos. Fui al pueblo de mi abuelo, y al pueblo Staiti, donde todos los 24 de julio hacen la fiesta patronal de Santa Ana, y ya he ido como 10 veces. Es hermoso, es un pueblito que está en una colina, y donde viven sólo viejitos, ya que los jóvenes se van a las grandes ciudades y lo han dejado casi en vías de extinción".

“Mi hijo hizo el camino al revés de mi abuelo. Se fue a Europa a buscar lo que mi abuelo había venido a buscar acá”, añadió el artista.

Respecto a la documentación de su ancestro, el mendocino explicó: "Mi abuelo no tenía acta de nacimiento, y su acta de casamiento dice que había nacido en Rodi (Rodi Milici), y en la muerte, que había nacido en Pozzo di Gotto. Son todos lugares que están cerquita, el tema era que cuando nacían, los tenían que inscribir en un mismo municipio, que era Castroreale, ya que los antes los pueblos chiquitos no tenían registro civil"

Se me ha hecho un poco mas fácil viajar, por la giras. Estando en el norte es más fácil y hasta más barato, ya que Nueva York está a siete horas de vuelo de Roma Se me ha hecho un poco mas fácil viajar, por la giras. Estando en el norte es más fácil y hasta más barato, ya que Nueva York está a siete horas de vuelo de Roma

"Mi primo me contagió todo esto de la historia. En el molino de mi abuelo que esta destruido, est{a la piedra, encontré la cerradura –pasador- de la puerta, y mi pareja comenzó a levantar fierros, los puso en una bolsa y lo llevé. Mi amigo Guillermo Rigattieri me hizo una obra con ellos y quedó algo maravilloso, que me conecta con mi abuelo y mis raíces", confesó Staiti.

Entre vinos y guitarras

Es bien sabido que además de músico, Felipe Staiti es un exitoso bodeguero desde hace unos años. Consultado si esta pasión enológica tiene relación con su abuelo, lo negó: "No, no (mi abuelo) tuvo relación con el vino. Mi papá sí, tuvo una finca con su hermano en Lavalle, pero no prosperó, fue un fracaso, cuando vendieron la bodega en los años '70, les pagaron con documentos que nunca cobraron".

Sin embargo, Staiti sí hace un homenaje a su raíces, y cuenta: "Nosotros en Italia, hacemos los vinos Posecco y Pinot Grigio, y el primero se llama Famiglia Staiti, en homenaje al origen italiano de mi familia".

Respecto a la música, arte que lo catapultó a la fama, junto a Marciano Cantero y Daniel Piccolo, en la formación original de los Enanitos, a los que se agregaron luego Sergio Embrioni, Tito Dávila, Eduardo Lalanne, Horacio Gómez, Natalio Staiti, Jota Morelli y Juan Pablo Staiti, el entrevistado declaró que se iba de viaje, pero por otros motivos. "Con los Enanos no tenemos gira hasta el 2022", contó.

"Me voy a Los Angeles (California, Estados Unidos) con los vinos, y tengo que ir a la fábrica Fender que están haciendo unos programas con charlas con artistas que cumplieron sus sueños para motivar a los trabajadores de sus fábricas en el mundo. Tengo una relación estrecha con la fábrica y estamos trabajando juntos en el modelo Staiticaster que está por salir. Estamos trabajando en eso", anunció Felipe, a modo de primicia, para concluir.