El huevo puede ser utilizado en distintas recetas en el hogar, completo o por separado. Te explico cómo dividir la clara de la yema con un truco facilísimo
Un truco casero no solo es para limpiar o desinfectar. Existen trucos de abuela para casi todo, incluso para preparar comidas en la cocina.
Si pensamos en recetas dulces o saladas, seguramente entre sus muchos ingredientes llevan huevos. El huevo se emplea en pastelería como ligue, como base de un merengue, en masas saladas y en prácticamente cualquier preparación. Encima de rico, versátil y práctico, es un alimento animal con enormes beneficios.
Seguramente alguna vez has tenido que preparar una receta que lleva yema y clara de huevo por separado. Esto suele pasar sobre todo en los merengues, piononos y pasteles que requieren las claras montadas a punto nieve por un lado y las yemas del huevo por otro para generar un efecto esponjoso.
¿Probaste con las manos, las cáscaras y fallaste en el intento? No te preocupes. Existe un truco extremadamente sencillo y novedoso para separar la yema de la clara sin destrozar el huevo no mezclar accidentalmente ambas partes. A continuación te explico paso a paso cómo realizarlo.
El huevo es un alimento de origen animal ampliamente consumido en el planeta y particularmente en Argentina. El país se posiciona en el segundo lugar en el ranking de consumidores encabezado por México. Argentina consume aproximadamente 363 huevos de gallina al año per cápita.
Este producto tan popular se obtiene del proceso de ovulación de la gallina en el que se produce un ovalo amarillo recubierto con una sustancia transparente acuosa, ambos almacenados en una cáscara y, combinados los tres, dan origen a lo que comúnmente llamamos huevo.
El huevo contiene vitamina D, proteínas y nutrientes que lo transforman en un componente ideal para una dieta saludable, más aún si se consume solo y hervido en agua.
Para este truco vas a necesitar un huevo, un recipiente o plato y una botella de plástico limpia y desinfectada correctamente para que no contamine el huevo.
Primero rompe el huevo y colócalo con cuidado en el plato tratando de que no se rompa la yema. Luego, con el pico de la botella posiciónate robre la yema cuidadosamente y presiona la botella con tus manos para que haga un efecto absorbente. La yema se elevará e introducirá en el interior de la botella, dejando solo la clara del huevo en el plato.
Coloca la yema del huevo que está dentro de la botella en otro recipiente y listo, así de sencillo y con un truco rápido obtienes una yema y clara de huevo impecables y listas para preparar una rica receta.