Un descubrimiento difícil de descifrar en el Vaticano terminó sorprendiendo a los arqueólogos italianos. Todos los detalles
El Vaticano fue la sede de un gran descubrimiento arqueológico
El Vaticano ha sido la sede de un impresionante descubrimiento arqueológico que dejó sin palabras a toda Italia. El mismo se ha dado en las preparaciones para el Jubileo del Año Santo Católico de 2025, que será en el corazón de la ciudad de Roma.
Los arqueólogos localizaron restos de un palacio medieval que pareció haber funcionado incluso antes de la inauguración del Vaticano para albergar a diferentes papas.
►TE PUEDE INTERESAR: El descubrimiento de un fenómeno meteorológico que cambiará el clima en Latinoamérica
Diferentes excavaciones arqueológicas cerca de la Archibasílica de San Juan de Letrán han hecho salir a la luz una estructura arquitectónica compleja de dilucidar en primera instancia. Finalmente, este descubrimiento sorprendió a toda Italia.
Según se cree, los muros de la misma estructura protegían al Patriarcio, una basílica monumental concebida por el emperador Constantino que fue ampliada y alojó al papado hasta el año 1305, antes de la inauguración del Vaticano.
Este descubrimiento realizado en Roma podría datar del Siglo IX, y se estima que fue conservada hasta el Siglo XIII mediante múltiples técnicas de restauración y reconstrucción.
►TE PUEDE INTERESAR: El impresionante descubrimiento en África que modifica la historia de la Tierra
Cabe destacar que, a la par de este descubrimiento, se realizaron hallazgos en paralelo que demuestran la gran importancia que la capital de Italia tiene en relación con la historia medieval.
Actualmente, la zona alrededor de San Juan de Letrán se está embelleciendo antes del Jubileo, que comenzará en diciembre y atraerá a 30 millones de personas en Italia.
Dejando de lado este descubrimiento, hay que decir que otros hallazgos se han realizado en el Vaticano. Por ejemplo, en abril del año pasado, un nuevo capítulo de la Biblia salió a la luz.
Los especialistas pudieron descubrir que este capítulo tenía nada menos que miles de versículos ocultos, algo que fue comprobado gracias a la utilización de fotografía violeta sobre un manuscrito en el descubrimiento.