Un evento inesperado ha sacudido a la comunidad científica dedicada a la conservación de la fauna asiática. Investigadores han logrado fotografiar a un raro felino que no había sido avistado en la nación desde hace casi tres décadas. El descubrimiento de ejemplares de gato de cabeza plana (Prionailurus planiceps) marca un hito, dado que se temía que estos animales se hubieran extinguido localmente. La confirmación visual se obtuvo gracias al uso de cámaras trampa remotas instaladas en el Santuario de Vida Silvestre Princesa Sirindhorn durante los años 2024 y 2025.
El asombroso descubrimiento del gato de cabeza plana en Tailandia tras décadas de ausencia
Este descubrimiento confirma la presencia de la especie en la región después de casi treinta años sin registros oficiales en el país asiático
La organización de conservación de felinos Panthera fue la encargada de comunicar el hallazgo este viernes 26 de diciembre, coincidiendo con el Día de la Protección de la Vida Silvestre en Tailandia. Las imágenes obtenidas representan las primeras detecciones verificadas desde 1995. Durante mucho tiempo, este animal había sido clasificado como "probablemente extinto" en el territorio tailandés, pero los esfuerzos sostenidos de protección y las alianzas científicas han permitido celebrar su retorno.
Este enigmático animal se caracteriza por su frente aplanada, rasgo que le da su nombre común. Se trata del felino más pequeño del sudeste asiático, con un peso aproximado de 2 kilogramos, un tamaño inferior al de un gato doméstico promedio. Su morfología incluye patas palmeadas, una adaptación evolutiva ideal para atravesar hábitats de humedales y bosques pantanosos de turba anegados, donde caza principalmente peces. Debido a sus hábitos esquivos y su entorno de difícil acceso, es una especie raramente observada por los seres humanos.
Un descubrimiento clave para la biodiversidad regional
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) evaluó a estos animales por última vez en 2014, catalogándolos como una especie en peligro de extinción. Las principales amenazas para su supervivencia incluyen la pérdida y degradación de los humedales y bosques de tierras bajas, sumado a presiones humanas como la sobrepesca y la caza. Por ello, el reciente hallazgo en Tailandia cobra una relevancia mayor, al demostrar que los ecosistemas locales aún pueden sostener poblaciones viables.
El trabajo de campo realizado por los investigadores se describe como el mayor estudio jamás realizado sobre este animal. Las cámaras no capturaron a un individuo solitario, sino que fotografiaron a varios ejemplares, incluyendo a una hembra acompañada de su cría. Este dato es fundamental, pues evidencia que la población no es remanente, sino que se está reproduciendo activamente en la región sur del país.
Atthapol Charoenchansa, director general del Departamento de Parques Nacionales de Tailandia, calificó el hallazgo como una victoria significativa para la conservación, tanto a nivel nacional como en el contexto más amplio del sudeste asiático. Los datos recopilados formarán parte de una nueva evaluación de la UICN liderada por Panthera, cuyos resultados se espera que sean publicados a principios de 2026, arrojando nueva luz sobre el estado actual de este pequeño depredador.






