En cualquier hogar se utiliza el papel de cocina para distintas actividades cotidianas: desde limpiarnos las manos hasta quitar el polvo de los anteojos. Se trata de un elemento útil y necesario, pero lamentablemente no es amigo del medio ambiente.
Expertos detallan que para fabricar una tonelada de papel de cocina se necesitan 17 árboles aproximadamente. Y los más usados para la fabricación de estas hojas son los pinos, abetos, eucaliptos y abedules. Además, es importante considerar que para que una planta esté lista para talar se necesitan esperar hasta 12 años, mientras que el papel lógicamente se consume a un ritmo mayor.
Por lo tanto, al comprar papel de cocina (o cualquier otro papel) estaremos contribuyendo a la deforestación que día a día termina con millones de árboles en todo el mundo. En consecuencia, es fundamental acudir al sustituto de este elemento, el cual cumplirá con las mismas tareas y será amigable con el medio ambiente.
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Papel de cocina.
¿Cuál es el sustituto del papel de cocina?
Especialistas indican que las servilletas de tela son una opción ecología que supone un ahorro significativo a nuestro bolsillo y también colaboraremos reduciendo la huella de carbono y cuidando el medio ambiente. Entonces, se sugiere comprar servilletas de este tipo, fabricadas con materiales absorbentes y duraderos.
Además, para la decoración de la cocina también habrá un plus si empezamos a utilizar servilletas de tela en reemplazo del tradicional papel. En sintonía, los trozos de tela también se podrán utilizar para la limpieza de manos y para secar utensilios que habitualmente usamos para cocinar, como cucharas, sartenes y vasos.
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Reemplaza el papel de cocina por las servilletas de tela.
En la misma línea, hay que destacar dos grandes ventajas que tienen estos elementos de tela en comparación de los que están fabricados con papel: por un lado, se pueden usar muchas veces, solo hay que lavarlos y mantenerlos higienizados; mientras que, por el otro, las servilletas de tela no representa riesgos de irritación como sí lo hace el papel de cocina.
