Muchas investigaciones han acreditado o desacreditado esta relación en distintos momentos de la ciencia. Lo cierto es que si existe un vínculo entre lo que comemos y el estado de nuestra piel, según lo indican los expertos. Particularmente, el acné aparece en la adolescencia y afecta a un 90% de las personas.
De acuerdo a lo explicado por los especialistas de Mayo Clinic, el acné es un trastorno de la piel que se produce cuando los folículos pilosos de tapan con grasa y células cutáneas muertas. Se caracteriza por aparecer con mayor intensidad en la adolescencia.
Existen distintas formas de tratar el acné, dependiendo del origen, tipo y grado de persistencia. Los granos dejan cicatrices en la piel que pueden dejar marca si se arrancan o rompen.
El acné puede desencadenar otros problemas como baja autoestima, sufrimiento emocional y cicatrices. Se clasifica de acuerdo a la gravedad y procedencia, de esta manera podemos enumerar tipos de acné más frecuentes:
Esta afección puede aparecer en distintas partes del cuerpo, principalmente en el rostro, la espalda, los hombros y el pecho.
¿Qué tienen que ver los alimentos con el acné? El acné se relaciona con la edad, sexo, antecedentes familiares, tipo de piel, sobrepeso y alimentación. Tradicionalmente se atribuye a la comida la culpa por generar granos en la piel.
Actualmente, existen estudios que respaldan lo anteriormente dicho. Los alimentos más perjudiciales que favorecen la aparición de acné en la piel, destacan los siguientes 3: