Dientes más sanos y fuertes
Existe una integra relación entre la salud bucal y la salud general. Los problemas dentales pueden desencadenar problemas de salud más complejos. Los odontólogos y especialistas en el tema remarcan la importancia de lavar los dientes cada día para prevenir infecciones y enfermedades bucodentales.
Los alimentos dejan residuos y bacterias en la boca que pueden adherirse a la placa dental generando una serie de ácidos que con el paso del tiempo dañan y destruyen el esmalte de los dientes y la salud de las encías.
¿Por qué no debes lavarte los dientes inmediatamente después de consumir estos alimentos?
Lucía Küster es una odontóloga chilena especializada en cirugía dental y fotografía de dientes y boca. En sus redes sociales, Lucía comparte distintos estudios, investigaciones y consejos de salud dental. Entre sus publicaciones figuran distintas recomendaciones profesionales y guías de limpieza para dientes.
Recientemente, la especialista compartió un posteo en el que explica por qué no se recomienda lavarse los dientes luego de consumir determinados alimentos y bebidas.
Entre estos destaca el café, las bebidas gaseosas, los jugos y bebidas cítricas. Además, Lucía especifica que no hay que lavarse los dientes inmediatamente después de comer y vomitar ¿A qué se debe?
De acuerdo a los especificado por la cirujana y odontóloga chilena, lo mejor es esperar 30 minutos antes de lavarse los dientes después de ingerir cualquier alimento. Los alimentos producen una alteración en el pH neutro natural de la boca. La acidez de los alimentos ablanda el esmalte dental y debe ser neutralizado por la saliva, proceso que dura alrededor de 30 minutos.
Si te lavas los dientes apenas terminas de comer, el ácido se esparce por toda la boca perjudicando el esmalte de los dientes. Puedes enjuagar tu boca con agua luego de consumir alimentos y esperar el tiempo aconsejado para lavarlos con pasta dental.
Consejos y recomendaciones para un correcto lavado de dientes
Los expertos en salud dental recomiendan realizar un lavado de dientes profundo y a conciencia por lo menos dos veces al día acompañado del uso de hilo dental. Además, es importante beber mucha agua y seguir una dieta saludable libre de bebidas azucaradas.
No menos importantes, los especialistas indican que el cepillo de dientes debe cambiarse cada dos o tres meses y las visitas al dentista deben realizarse periódicamente.