Pero la bicicleta puede jugarle una mala pasada a cualquiera, al pincharse una de las dos ruedas. Por un clavo, un alambrito, un tornillo o un pinche de algún arbusto, las cubiertas pueden ser penetradas y llegar hasta la cámara, desinflándolas casi en el acto.
Para no correr el riesgo de quedar tirado y poder llegar a destino, hay un truco que se puede hacer con las ruedas para que no se desinflen cuando una pinchadura se hizo presente.
El truco para no pinchar la bicicleta
Hay una manera muy efectiva que sirve para que las ruedas de la bicicleta no se desinflen cuando se pinchan y que todas las personas que usan este rodado, lo deberían implementar.
Hoy en día muchos recurren al tubelizado de las ruedas. Tubelizar o hacer tubeless una rueda, significa que ya no existirán más las cámaras y solamente quedarán las cubiertas.
Las ruedas se someten a un tratamiento que incluye un líquido antipinchaduras, que queda atrapado y fluyendo por todo el interior de la cubierta.
Ante una pinchadura, el líquido rápidamente llegará hasta la perforación, tapando en cuestión de segundos la misma. Se trata de un beneficio para no desaprovechar.
Cómo hacer el truco del tubeless para bicicletas
Los más experimentados, seguramente ya cuenten con las ruedas de las bicicletas tubelizadas. Los que no, lo mejor es llevar las ruedas a una bicicletería para que las tubelicen, ya que hay que estar canchero para poder realizarlo y que quede bien.
Desde colocar la cinta en la llanta, ajustar adecuadamente la válvula y entalonar la cubierta para que no se escape el aire, es una tarea que sí saben hacer los bicicleteros.
Para realizar este truco con las ruedas de la bicicleta se necesitan estos implementos:
- Cinta tubeless
- Válvula especial para tubeless
- Cubierta de cualquier tipo
- Líquido para tubelizar
Una vez tubelizadas las ruedas, el mantenimiento es muy fácil ya que, requiere ir agregándole con una jeringa líquido antipinchaduras por la válvula (lo venden en la bicicletería). Este proceso debe repetirse cada 2 o 3 meses, dependiendo de cuánto aire pierda gradualmente la cubierta.