Dos representantes de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) en Mendoza defendieron el proyecto minero Cerro Amarillo cuya Declaración de Impacto Ambiental (DIA) está siendo estudiada por el Senado.
Minería en Malargüe
Los senadores recibieron al rector de la UTN, el ingeniero José Balacco; y al licenciado Julio Salvarredi, profesor adjunto de la cátedra de Geología Aplicada, para escuchar su análisis sobre el proyecto de ley para la exploración de Cerro Amarillo.
En una nueva reunión de las comisiones de Ambiente e Hidrocarburos, encabezadas por Ernesto Mancinelli y Rolando Baldasso, los senadores recibieron al rector de la UTN, el ingeniero José Balacco; y al licenciado Julio Salvarredi, profesor adjunto de la cátedra de Geología Aplicada.
Ambos coincidieron en que el impacto ambiental de las labores previstas en una etapa de exploración de Cerro Amarillo es escaso y que no se advierten consideraciones que justifiquen la desaprobación de la DIA.
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Su visita responde a una serie de exposiciones de las que los senadores de ambas comisiones están siendo testigos para definir si el proyecto, reflotado con la DIA de 2014, podrá o no ser tratado en el recinto.
Según indicaron desde el oficialismo, se buscará el dictamen favorable en febrero del 2023 para avanzar con la votación y que pase a Diputados.
La opinión de la UTN sobre el proyecto minero de exploración Cerro Amarillo
"Los trabajos a realizar, descriptos, realizados según las prescripciones ambientales existentes implican un completo control sobre los escasos impactos ambientales, que resulten mínimos y cuyos efectos no exceden al reducido lapso de ejecución de los mismos", remarcaron según indicaron desde prensa del Senado de la Provincia.
Salvarredi enfatizó que dada la baja incidencia ambiental de las labores mencionadas y programadas, no se advierten consideraciones que justifiquen cabalmente la desaprobación de la DIA.
"Más aún la desaprobación a la misma, no justificada racionalmente, sería una obstaculización a las tareas de exploración de recursos mineros estratégicos, resultando en un perjuicio para la región y el país, que necesitan de su evaluación y conocimiento correspondiente para adoptar decisiones de gobierno respectivas y acertadas con el bien común", aseveró el licenciado.
Y destacó: "Una consideración referible a esta clase de yacimientos, que excede a esta DIA, es la conveniencia que el aprovechamiento cuidados de tales recursos debiera tener como finalidad importante la refinación e industrialización de cobre en el país por sustitución (parcial) de exportaciones, desarrollo de conocimiento y capacidades correspondientes, mayor independencia en relaciones comerciales globales y mayor ocupación laboral".
Qué se analiza en el Senado
El proyecto de ley para la exploración de Cerro Amarillo busca la ratificación de la Resolución Conjunta Nº 031 de la Dirección de Minería del Ministerio de Energía y Nº 412 de la Dirección de Protección Ambiental del Ministerio de Tierras, Ambiente y Recursos Naturales, del 29 de agosto de 2014, que otorgó la Declaración de Impacto Ambiental.
En su momento, la aprobación de la DIA se frenó en la Legislatura provincial porque aún no se contaba con el inventario de glaciares que cuatro años más tarde culminaría el Ianiglia-Conicet.
Con ese documento clave en mano, el oficialismo actual reflotó el proyecto de ley y lo presentó en el Senado para su aprobación.
La iniciativa contempla la exploración del yacimiento para evaluar sus características geofísicas y el potencial geológico con el objetivo de determinar si en el mismo podría desarrollarse un proyecto minero dentro de la legislación vigente, es decir, si cumple con las leyes 26.639 para la preservación de los Glaciares, la 6045 de Áreas Naturales Protegidas y la ley provincial Nº 7.722.
En las reuniones de comisión conjunta de Ambiente e Hidrocarburos se está analizando junto a expertos no solo los aspectos ambientales y el cumplimiento del proyecto con el marco legislativo, sino también si aquella evaluación de impacto ambiental que terminó hace ocho años sigue vigente o si es necesario realizar una nueva.
La propuesta se seguirá debatiendo en comisiones hasta febrero del 2023, cuando se presume que saldrá con dictamen favorable para ser tratada en el recinto.
De obtener media sanción, pasará a Diputados para su análisis y votación.
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