Por la fuerza con la que lanzaron las piedras de gran tamaño provocaron la rotura de vidrios, pero ningún pasajero fue herido. Los conductores señalaron que están cansados, ya que es algo que viven a diario.
Pero advirtieron que la situación en esa zona se pone peor los fines de semana, cuando muchas personas salen de los boliches de Luján y se suben al micro sin pagar.
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Las piedras de gran tamaño quedaron dentro del colectivo luego de romper los vidrios cuando circulaba por Luján.
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Además, los que no llegan a subirse al micro apedrean la unidad para hacer daños o hasta para herir a los pasajeros. Señalaron que esto ocurre especialmente los viernes y sábados, y ya no saben cómo actuar ante estos hechos.
Otras líneas también reportan problemas
Hace 10 días, choferes del grupo 400 advirtieron que si continúan los ataques a piedrazos no podrán seguir realizando ciertos recorridos por barrios del Gran Mendoza. Fue luego de que en un lapso de 6 horas se concretara una serie de agresiones que dejaron vidrios rotos y mucha preocupación.
Mario Oviedo, responsable de tráfico del Grupo 400, aseguró que en esa línea no son los únicos que padecen hechos como los que tuvieron lugar en la llamada "Triple Frontera" que marca el límite entre Godoy Cruz, Luján y Maipú. Otro tanto -dijo- ocurre con los colegas de los grupos 600 y 700, que afrontan situaciones similares.
Ahora se sumó el caso de Luján, en una lista que no parece haber terminado aún.
