El capitán del Tomba se refirió a los rumores sobre su salida del club.
La emoción del capitán de Godoy Cruz por su posible salida de club.
Godoy Cruz tuvo un pálido debut oficial en el Feliciano Gambarte con un empate sin goles ante Sarmiento. En el estreno por lo puntos de renovado estadio, el equipo de Esteban Solari no pudo sumar de a tres ante el elenco juninse.
El encuentro tuvo un sabor especial para Gonzalo Ábrego, capitán y referente del plantel, por haber sido su eventual último partido con la camiseta de Godoy Cruz. Los rumores sobre su inmimente salida a Vélez en este mercado de pases se han acrecentado y podría definirse en los días siguientes la transferencia a Liniers.
Sobre la posibilidad de emigrar nuevamente de club (antes lo había hecho hacia Cremonese), Ábrego respondió: "Hay muchas cosas que se hablan. Para mucha gente mi ciclo está cumplido en Godoy Cruz y yo amo mucho estar acá. Si fue mi último partido, el simple hecho de pensarlo me emociona y me duele por todas las cosas que he pasado acá".
Además, el capitán de Godoy Cruz hizo alusión al hecho de tener que rendir y responder en cancha, siendo un joven profesional, en medio de todos los rumores. "Un poco cuesta, sabiendo todo el tiempo que llevo en el club y todo lo que siento".
"No nos vamos contentos por cómo se dio el partido, que fue duro, y sabíamos lo que venían a hacer ellos. Nos costó un poco generar situaciones y nos vamos con un sabor amargo por lo que fue la vuelta al Gambarte, que fue una fiesta increíble y no haberle dado un triunfo a la gente nos duele", sentenció Gonzalo Ábrego respecto del encuentro ante Sarmiento de Junín.
"La gente nos empujó en todo momento, todos estábamos muy ilusionados con este día y nos duele un poco no llevarnos los 3 puntos", sumó el volante de Tomba en cuanto a la fiesta que se vivió en las tribunas celebrando el regreso al estadio tras 20 años fuera de casa.
El otro condimento especial para Gonzalo Ábrego fue haber tenido los honores de convertirse en el capitán bodeguero en la vuelta oficial al Feliciano Gambarte. "Es un orgullo enorme, es lo que siempre soñé desde que llegué al club. Soñé con jugar en el Gambarte y con la fiesta que se vio así que, en ese sentido, estoy muy contento".
Si bien su futuro es incierto, el capitán entrena con sus compañeros y en cuestión de días podría definirse su futuro futbolístico.