De esta forma, el Bayern Munich consiguió su décima segunda copa con un poco de preocupaciones, porque el Leipzig le hizo partido y puso en peligro el título.
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Los goles para el equipo campeón fueron de Jamal Muisala, Sadio Mané, Benjamín Pavard, Serge Gnabry y Leory Sanè. Para el conjunto del Leipzig marcaron Marcel Halstenberg, Christopher Nkunku y Dani Olmo.
Los dirigidos por Julian Nagelsmann se marcharon al descanso con un contundente 3-0 en el marcador y manejó las acciones con total tranquilidad. En esa primera mitad los goles llegaron a los 14 minutos por medio de Musiala, a los 31 marcó Mané y en el cierre de las acciones puso su sello Pavard.
El Leipzig aumentó su presión en el segundo tiempo y tras algunos ataques sobre el arco del equipo de Munich llegó el descuento Halstenberg en lo que mostraba ser una levantada futbolística del conjunto dirigido por Domenico Tedesco. Sin embargo, Serge Gnabry volvió a aumentar la ventaja para el conjunto de Nagelsmann, que respiraba sobre la presión que propuso el Leipzig.
A los 22 minutos del complemento, desde la pena máxima Nkuku volvió a acercar a su equipo en el marcador y cuando moría el partido Olmo puso a tiro de empatar el partido al Leipzig. En el tiempo adicional, Sanè apareció para decretar el resultado final y que el Bayer Munich grite campeón.
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El Bayern Munich se coronó una vez más en la Supercopa de Alemania.
