La creación de la primera clínica para tratar la resaca en Australia ha motivado las críticas de la Asociación Médica Australiana por considerar que alienta las borracheras descontroladas, informan hoy medios locales.La clínica especializada en tratar los efectos producidos por el consumo excesivo de alcohol, con sede en Sídney, proporciona a sus pacientes líquidos intravenosos, vitaminas, medicamentos contra las náuseas y oxígeno por un coste que oscila entre los 66 y los 140 dólares, según la cadena local ABC.
La Asociación Médica Australiana (AMA) considera que la existencia de este tipo de clínicas puede alentar las borracheras descontroladas.