La modelo y bailarina Silvina Escudero, que hace unos días clavó un escotazo y no dejó nada para la imaginación, compartió en sus redes sociales una de las fotos más esperada por sus seguidores: su reciente anillo de bodas.
La modelo y bailarina Silvina Escudero, que hace unos días clavó un escotazo y no dejó nada para la imaginación, compartió en sus redes sociales una de las fotos más esperada por sus seguidores: su reciente anillo de bodas.
La bailarina recibió una romántica propuesta de casamiento de parte de su novio Federico en las playas de Mallorca, España.
La actriz subió una foto a su cuenta de Instagram mostrando su mano derecha -en la otra mano de dónde se usa habitualmente- y luciendo su sortija. A la imagen la acompañó con dos emojis: un anillo y un corazón.
La publicación recibió miles de "Me Gusta" y un centenar de comentarios entre los que se destacan el de varios famosos. "No no no che, no entiendo que significa!!! Te compraste un anillo verdad", le escribió Jorgito Moliniers.
Silvina Escudero sorprendió hace unos días al anunciar su casamiento con Federico, su pareja desde hace cinco años. En el programa La noche del domingo, América TV, la bailarina confirmó cuándo se casa y mostró el brillante anillo de compromiso que luce y explicó por qué lo tiene en otro dedo y no en el común lugar donde se luce.
La bailarina explicó que estuvo unos días en Europa visitando a una amiga y fue sorprendida por su novio en un restaurant.
"Cuando llegamos y nos ubicamos en la mesa, me dice: ‘Me voy al baño ya’. ‘Acabamos de venir de tu casa, ¿ya te vas al baño?’. Me quedo ahí, empecé a grabar para historias de Instagram y aparece Fede en escena”, añadió la modelo en el ciclo que conduce Mariano Iúdica.
“Se siente a la mesa Federico, que estaba en Buenos Aires. ¿Qué hizo? ¿20 horas de vuelo y apareció ahí? Vino con el anillo y me hizo toda una propuesta romántica hermosa”, explicó sobre la propuesta de boda que le hizo su novio en público.
Y agregó: “Se puso de rodillas y me hizo toda una declaración de amor con unas palabras divinas. Cuando nos abrazamos y me puso el anillo en el dedo, todo el restaurante aplaudía. Y había una pareja de rusos, andá a entenderle lo que me decían, que me muestra que nos habían grabado y habían sacado fotos del momento. Después nos lo terminaron mandando por mail”.