La denuncia formal fue presentada el 16 de abril por William J. Pulte, director de la Agencia Federal de Financiamiento de Viviendas. En una carta enviada al Departamento de Justicia, Pulte acusa a la fiscal de haber manipulado documentos y registros de propiedad para acceder a préstamos hipotecarios.
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La fiscal alega "error de papeleo"
Este caso tiene una carga simbólica fuerte: es el mismo tipo de delito por el que Letitia James, como fiscal de Nueva York, llevó a juicio en 2024 al expresidente Donald Trump, a sus hijos y a un colaborador cercano.
Tras el regreso de Trump a la Casa Blanca, James y un grupo de fiscales demócratas interpusieron múltiples demandas contra sus órdenes ejecutivas, muchas de las cuales quedaron suspendidas.
En su defensa, James contrató al reconocido abogado Abbé Lowell. En una carta dirigida a la fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, Lowell aseguró que “cualquier error de su cliente fue esencialmente un error de papeleo”. Añadió que, si los fiscales buscan la verdad, están listos para desmentir las acusaciones con pruebas claras.
Lowell sostiene que esta causa es una “represalia política” impulsada por Trump, quien habría amenazado con tomar medidas contra aquellos que lo enfrentaran judicialmente.
