La actriz Demi Moore sufrió una pérdida irreparable el lunes pasado, cuando uno de sus asistentes descubrió que le habían robado unos 200 mil dólares en vestidos de gala que estaban guardados en un depósito del norte de Holywood.Moore, de 52 años, mantenía parte de su guardarropas más lujoso en un depósito, quizás para evitar que alguna de sus tres hijas tomaran sus vestidos a préstamo por tiempo indefinido. Pero su estrategia salió mal, ya que los delincuentes se llevaron las prendas, que en algunos casos son modelos exclusivos, informó el sitio TMZ.
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