enero y a principios de este mes comenzó a compartir información al respecto con la Agencia deSeguridad Nacional del Pentágono, encargada de técnicas de espionaje internacional. Las dos escuelas de las que procedió el ataque son la Universidad Jiaotong, de Shanghai, y laEscuela Vocacional de Lanxiang, según reveló el pasado viernes el diario The New York Times citandofuentes de una empresa de seguridad privada que ha colaborado con Google. Previamente, los técnicosde la empresa de seguridad online iDefense contrastaron las direcciones IP desde las que se lanzóel ataque con ofensivas anteriores y descubrieron que habían sido usadas en el pasado por agenciasgubernamentales chinas. La de Jiaotong es una prestigiosa universidad china con un programa en ingeniería informáticade renombre internacional. Un grupo de estudiantes de esa institución ganaron a principios de mesun concurso de programación organizado por la empresa IBM, conocido en el ramo como la batalla delos cerebros. Lanxiang es una institución de educación secundaria que, entre otros cometidos, formaa informáticos que quieren prestar servicio en el ejército. Según un reciente informe de la comisión gubernamental de Asesoramiento en Economía ySeguridad EE UU-China, el ingeniero Peng Yinan, cofundador de Javaphile, uno de los principalesgrupos de hackers de China, estudió en Jiaotong, y 'tiene una relación profesional, de asesor, conel Departamento de Seguridad Pública de Shanghai'. Peng dio una conferencia en esa universidad en2007 sobre 'pasos básicos para convertirse en un hacker', y se presentó ante los asistentes como'un hacker de sobrada experiencia'. Diversos analistas han identificado a hackers como Yinan como posibles fuentes de un ataqueque, si no fue organizado directamente por el Gobierno chino, sí que podría haber sido la obra dejóvenes internautas antiamericanos motivados por el nacionalismo. Los ingenieros que investigan el ataque han descubierto también que pudo comenzar en abril.Google lo identificó en diciembre. Entonces, los hackers ya habían penetrado, a través de susservidores, en las cuentas de correo de Gmail de, al menos, dos activistas a favor de la liberacióndel Tíbet, algo que levantó las sospechas del Gobierno de EE UU, que exigió, a través delDepartamento de Estado, que Pekín ordene una investigación exhaustiva./DAVID ALANDETE