Cada vez que bebemos una gaseosa o agua mineral, terminamos tirando la botella con su tapita de plástico a la basura, pero ambas partes pueden reciclarse y convertirse en increíbles ideas para adornar el hogar.
Cada vez que bebemos una gaseosa o agua mineral, terminamos tirando la botella con su tapita de plástico a la basura, pero ambas partes pueden reciclarse y convertirse en increíbles ideas para adornar el hogar.
En la siguiente nota te enseñaremos a reciclar y aprovechar las tapitas de plástico, las cuales en la actualidad se consiguen de diversos colores.
Las tapitas de gaseosa pueden reciclarse por ejemplo para hacer hermosos juegos de memoria para los más pequeños de la casa. Solo tienes que buscar imágenes (dos de cada una) de animales o de diversos objetos y pegarlas en la parte interna de la tapa.
Te aconsejamos colocar sobre la imagen que hayas elegido una buena capa de plasticola blanca o de silicona líquida, ya que de esta forma podrás proteger el dibujo.
Estos juegos de memoria te salvarán de cualquier momento de aburrimiento, e incluso es una gran forma de comenzar a enseñarle a los niños que todo puede reciclarse y utilizarse de otra forma. Además, de esta forma reducimos la producción de basura en el mundo.
Por otro lado, las tapitas de gaseosa pueden reciclarse y crear una hermosa paleta de pintura. Pega las tapas de gaseosas con su parte lisa hacia abajo en un trozo de plástico (no te aconsejamos que sea cartón porque se dañará con el agua) y podrás rellenar cada una de ellas con las pinturas (acrílicos, témperas, etc) que prefieras.
También puedes pegar las tapitas de gaseosa en las tapas de los envases plástico de los helados, los cuales son del mismo material, y además se pueden lavar fácilmente.
Otra idea de reciclaje consiste en utilizar las tapitas de plástico para crear un juego de tres en línea o ta-te-ti. En este caso te aconsejamos que utilices tapas de dos colores diferentes, para que los jugadores se puedan diferenciar.