Entre las actividades que siguen sin ser autorizadas en Mendoza están los velorios. Las salas que prestan estos servicios fúnebres están cerradas desde el comienzo de la pandemia, en marzo, y sus propietarios aspiran a que les permitan reabrir en los próximos días. Para ello es que han presentado un protocolo con los detalles de cómo será el funcionamiento una vez que puedan funcionar nuevamente.
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Guillermo Mangione, de la Asociación Cuyana de Empresas Fúnebres, detalló a Radio Nihuil que ya "enviamos un protocolo a las autoridades provinciales patra poder empezar a velar otra vez a quienes fallecen, un ritual muy pedido por los deudos".
Como en otros negocios, como por ejemplo bares y restaurantes, quienes asistan a los velorios, de aprobarse el pedido de los empresarios fúnebres, deberán "llenar declaraciones juradas. Cada familia lo tendrá que hacer. En esa documentación deben aclarar que no han tenido contacto con alguien con coronavirus". Caso contrario no podrán concurrir.
Los asistentes a los velatorios deberán dejar todos sus datos particulares, como nombre, número de DNI (Documento Nacional de Identidad) y número de teléfono. "Es para hacer un seguimiento epidemiológico en caso de que se dé algún positivo de coronavirus entre quienes asistieron al servicio", amplió Mangione.
El protocolo que se aprueba también dispondrá un límite de concurrencia de personas como la obligatoriedad de mantener el aislamiento social de dos metros entre personas.
También señaló el empresario que "algunas personas que se han acercado a contratarnos nos contaron que saben de velatorios que se han relizado en domicilios pero no podemos dar precisiones porque no sabemos cómo ni cuándo puede haber ocurrido"
Actualmente no están permitidos los velatorios. Las empresas fúnebres sólo trasladan los cuerpos de los hospitales a los crematorios o a los parques de descanso. Así se reduce al máximo la posibilidad de contagio. Sí están permitidas las visitas a los cementerios.