Una de las sensaciones más especiales que una persona puede vivir es leer, ya que las novelas pueden transportarnos a diversos universos en cuestión de minutos.
Seguro te habrás dado cuenta que los libros antiguos suelen tener un olor en especial, el cual es considerado por muchas personas como "único".
Los libros se realizan con un compuesto denominado lignina, el cual es abundante en el mundo vegetal. Con el correr de los años, la lignina comienza a descomponerse y se oxida. Esto no solo da lugar a que el papel se ponga amarillo, sino que además comienza a desprender olor.
Este proceso se conoce como "hidrólisis ácida" y produce una gran cantidad de compuestos orgánicos volátiles (COV) que contribuyen al olor.
El olor de los libros antiguos suele describirse por las personas como una combinación de notas herbáceas, ácidos, vainilla y un toque de humedad. La sensación que provoca este olor se llama "bibliosmia" y esto hace que el lector genere un vínculo especial con el libro.
¿Qué otros compuestos generan lo que se conoce como "olor a libro antiguo"?
Tolueno y etilbenceno, que tienen un olor dulce
Vanilina, que tiene un olor a vainilla
Benzaldehído y furfural, que tienen un olor a almendra
2 – etilhexanol, que tiene un olor floral
En caso de que el libro tenga un olor fuerte, es probable que sus hojas sean frágiles. Si por otro lado, un libro tiene un olor a humedad, se puede intentar ponerlo al sol y al aire libre durante varias horas o días para poder quitar ese olor. Una vez que los hongos hayan muerto, se puede espolvorear bicarbonato de sodio sobre las páginas y dejarlo actuar toda la noche.
