El ritual del asado argentino es casi sagrado, y cada detalle cuenta. Y uno de los trucos virales que empezó a ganar popularidad entre los asadores más experimentados: agregarle bicarbonato de sodio a la leña. ¿Para qué sirve? ¿Cuáles son sus beneficios? Acá te lo contamos.

¿Por qué se le pone bicarbonato a la leña del asado?

El bicarbonato de sodio tiene propiedades que pueden mejorar la calidad del fuego y, en consecuencia, del asado. Este truco casero se basa en el efecto químico del bicarbonato al entrar en contacto con el calor: actúa como un neutralizador de olores y como catalizador de la combustión.

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Es una sustancia no tóxica que, al someterse al calor, se descompone en agua, dióxido de carbono y carbonato de sodio, sin liberar sustancias dañinas. Además, su uso es común incluso en cocinas industriales para limpiar hornos y neutralizar olores fuertes.

Beneficios de usar bicarbonato en la leña del asado

Uno de los principales beneficios del bicarbonato es que no altera el sabor de la carne ni de las achuras. Al contrario, al generar un fuego más limpio, puede incluso mejorar el resultado final del asado, manteniendo el sabor tradicional pero con menos interferencias de humo o impurezas.

Los demás beneficios se concentran en:

Reducir el humo excesivo: El bicarbonato ayuda a que la leña se queme de forma más limpia, generando menos humo denso y molesto, especialmente si la madera no está completamente seca.

Neutralizar olores no deseados: Si la leña tiene algo de humedad o algún tipo de impureza, el bicarbonato puede absorber y neutralizar aromas desagradables que podrían alterar el sabor del asado.

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Mejorar la calidad de la brasa: Al actuar como un catalizador, contribuye a una combustión más pareja, generando brasas más estables y duraderas.

Evitar que la grasa produzca mucho humo al caer: Si tiras un poco de bicarbonato directamente sobre la grasa que cae en las brasas, reduce el humo negro que se levanta y que puede impregnar la carne.

Cómo aplicarlo

  1. Antes de encender la leña, espolvorea una pequeña cantidad (una o dos cucharadas) sobre los troncos.
  2. Enciende el fuego como de costumbre.
  3. Si notas que el humo es muy espeso, puedes agregar una pizca más mientras arde.
  4. También puedes tirar un poco sobre las brasas si ves que la grasa cae y genera mucho humo negro.

Ponerle bicarbonato a la leña del asado es un truco simple, barato y efectivo que mejora la calidad del fuego, reduce el humo, y protege el sabor de la carne.