Peligro inesperado: la famosa especia que puede ocasionar la muerte
A pesar de ser una especia muy utilizada en la cocina y un tradicional remedio casero para los problemas digestivos, puede traer varias consecuencias negativas para la salud
Esta especia es utilizada en infusiones como un "remedio casero tradicional" principalmente para los problemas digestivos. También posee propiedades culinarias para potenciar sabores y aromas. A pesar de esto, el instituto de Salud pública de Chile, recomienda consumirlo con moderación, ya que puede traer puede tener efectos peligrosos cuando no se usa adecuadamente.
La especia en cuestión es el anís, una planta de la familia de las esquindráceas provenientes de la China, que también se la conoce como bandiana. Su fruto contiene diversos principios activos que si se consumen en dosis altas puede ser perjudicial para la salud.
Según un comunicado oficial de instituto de Salud pública de Chile, la utilización no controlada de Anís estrellado, conlleva un riesgo potencial para la salud. Por un lado, a dosis altas, los aceites esenciales anetol y estragol pueden producir neurotoxicidad, provocando:
Delirios
Convulsiones
Depresión del sistema nervioso central
Coma
Depresión respiratoria
Muerte
El anís estrellado está considerado dentro del listado de medicamentos herbarios tradicionales de Chile. Sin embargo, su uso solo está avalado por la tradición, no existiendo evidencia científica acerca de su eficacia terapéutica y no existe consenso en el modo de preparación de la infusión.
Los síntomas de toxicidad por consumir esta especia sin cuidado
Según el mismo comunicado, los casos documentados, especialmente en infusiones para bebés, que han resultado en hospitalizaciones debido a efectos neurotóxicos presentaron ciertos síntomas en común como:
Irritabilidad
Hiperexcitación nerviosa
Movimientos oculares incontrolables e involuntarios
Rigidez muscular
Contracciones faciales involuntarias
Así mismo, la revista digestiva española indica que la toxicidad por consumir anís estrellado ha sido descrita en numerosos países, caracterizándose por síntomas gastrointestinales y neurológicos como convulsiones, movimientos anormales de extremidades (temblor, hipertonía, espasmos) y oculares.
