Elegir entre la enorme variedad de plantas que existen, resulta una tarea difícil. Muchos jardineros caen siempre en las opciones más populares, margaritas o petunias, ya que resultan especies de fácil cuidado y además embellecen cualquier espacio. En este artículo, te compartimos una planta diferente, para que salgas de lo común, que convertirá tu jardín en un paraíso.
Conoce los cuidados de la Zinnia elegans, una planta ornamental. Imagen: Freepik
La Zinnia elegans, conocida popularmente como Mal de ojo, es una planta de la familia Asteraceae. Se trata de una especie nativa de México, que se ha naturalizado en diferentes regiones del mundo, en Sudamérica, Estados Unidos, Australia e Italia.
Las zinnias son flores anuales de temporada cálida y de rápido crecimiento que florecen con profusión y requieren un cuidado mínimo. Estas flores se presentan en una paleta de colores vibrantes, y se añaden nuevas cada año, incluyendo algunas blancas frías.
Cuidados básicos de la planta
Según los expertos de The Spruce, "las zinnias, a diferencia de muchas plantas catalogadas como anuales que son perennes en las zonas de rusticidad más cálidas, son anuales en todas partes".
Es importante elegir un lugar soleado donde la planta reciba al menos seis horas de luz solar directa al día. En pleno sol, obtendrá una floración más abundante y ayudará a prevenir el mildiú polvoroso, una enfermedad fúngica que suele afectarla.
Las zinnias requieren un suelo rico en nutrientes, pero que tenga buen drenaje. Estas plantas no son exigentes con el nivel de pH. En general, cualquier mezcla de suelo con buen drenaje debería ser suficiente.
Hay que regar ocasionalmente las zinnias de casa, aunque son bastante tolerantes a la sequía. Por último, estas plantas necesitan fertilización ocasional, una o dos veces durante la temporada de crecimiento.